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El golpe más duro en la vida de Ricky Rubio, su lado más oculto y sus conquistas

Descubrimos el lado más personal y menos conocido del base de El Masnou

Ricard Rubio Vives, más conocido como Ricky Rubio, se ha convertido en uno de los hombres del momento a sus 28 años de edad después de ser nombrado este domingo MVP del Mundial de baloncesto celebrado en China en el que España se proclamó campeona tras vencer a Argentina.

Un reconocimiento que se merecía después de tanto sacrificio y lucha. Por ello, el jugador de baloncesto no pudo evitar emocionarse cuando tuvo la copa del mundo entre sus manos. Le dedicó el triunfo a su madre, cogiendo el trofeo mientras alzaba su vista al cielo y apuntaba con la mano izquierda a lo más alto.

Después, en su discurso, tuvo unas emotivas palabras hacia ella: “Sé que desde ahí arriba estará muy contenta. Hay alguien que siempre está ahí… Perdí a mi madre hace tres años pero sé que ella está detrás, empujándome a ser mejor. Sé que no hay nadie en este mundo que me haya querido más que ella. Ella me conduce siempre. Incluso aunque no esté aquí, puedo sentirla”, declaró emocionado.

Ricky Rubio, con Rafa Nadal, en 2009.

Ricky Rubio se planteó dejar el baloncesto por la enfermedad de su madre

Ricky estuvo a punto de tirar la toalla por la enfermedad de su madre. “Me planteé dejar el baloncesto porque no me ilusionaba”, ha confesado en varios medios.

“No tengo reparos en decirlo. Imagine lo que es estar hablando con tu madre y que te tenga que colgar por lo mal que se encuentra. ¿Qué haces entonces a 10.000 kilómetros? ¿Qué importa entonces el baloncesto? Seguí en Minnesota porque ella me lo pidió, decía que esa era la única forma que tenía yo de luchar por ella. Muchas veces no quería ir a jugar, lo hacía por ella”, ha señalado en una entrevista para ‘La Vanguardia’.

Ricky tiene dos hermanos también deportistas

Los padres de Ricky, Tona Vives y Esteve Rubio, se casaron el 10 de septiembre de 1983 y tuvieron tres hijos: Ricky, Marc, debutó en la liga ACB con 17 años en las filas del Joventut, después estuvo en la LEB Oro y ya lleva seis temporadas en el Mataró Parc Boet, y Laia, que jugaba en el Platges de Mataró, y que consiguió ser campeona de España infantil de Selecciones Autonómicas a los 14 años.

Esteve y Tona inculcaron a sus hijos el amor por el deporte y la humildad. Los dos siempre acompañaban a sus hijos a los partidos, fueran donde fuesen, porque querían estar siempre a su lado.

Los padres de Ricky Rubio, Tona y Esteve, con él y su hermana.

Su madre, Tona Vives, murió a causa de un cáncer de pulmón

La madre del jugador estuvo siempre muy unida a sus tres hijos pero más concretamente con Ricky, con el que vivió los momentos más importantes de su brillante pero corta carrera: su debut a los 14 años en la Liga ACB –siendo el jugador más joven de la historia en debutar aquí-, también en el Joventut, su fichaje en el Barça Lassa y el salto a la NBA en la temporada 2011-2012.

La muerte de Tona, en mayo de 2016, a los 56 años, fue un duro golpe en la vida de Ricky. “Pensaba que tenía tiempo, que al haber empezado tan joven ya saldrían mejor las cosas más adelante. Y en el tema personal, la vida te pone obstáculos. Y fue un despertar de golpe, fue una maduración muy rápida el ver que la persona más importante de mi vida en aquel momento, mi madre, ya no estaba. Pero me dio una lección de vida que nadie más me la podía dar. Y es esto, luchar hasta el final. Mi madre me seguirá guiando”. Ella siempre lo decía: nunca perderé contra el cáncer porque nunca me rendiré”, indicó en una entrevista a El Món a RAC-1, con Jordi Basté.

El jugador tuvo depresión durante 60 días

Ricky llegó a estar sumido en una depresión: “Estaba muy perdido. No había un camino por el que seguir. Me planteé muchas cosas, incluso dejar el baloncesto, porque no me ilusionaba. Te planteas muchas cosas. Pero he conocido a mucha gente, he perdido el miedo, la meditación la he usado muchísimo”, relató.

“He meditado 25 días seguidos. Todos los que he estado en China. Nunca después de la época de depresión, que estuve 60 días, había llegado a meditar tantos días seguidos. Es la constancia y el objetivo que tenía desde que aterricé aquí. Aquí vine con el objetivo de ganar y quería estar al máximo”, desveló.

Su padre, Esteve Rubio, fue entrenador de El Masnou

El padre de Ricky era entrenador de El Masnou y lo dejó para poder estar junto a sus hijos. “Cuando mis chavales empezaron en el Joventut, dejé de entrenar para seguir sus partidos. Eran infantiles. Es cuando más he disfrutado, en esa edad el deporte es más puro”, manifestó.

El padre de Ricky es uno de sus mayores fans a pesar de que no pudo estar con él en China por un problema de visado. Esteve Rubio Bert siempre tuvo claro que llegaría lejos: “Cuando entra a la pista se transforma. Ahí tiene madera de líder. Lo lleva innato. Recuerdo que ya cuando empezó en el Joventut, que tenía 14 años cuando subió al primer equipo, ya los americanos y todos le hacían caso”, señaló recientemente.

Ricky quería ser como Michael Jordan y tenía un poster enorme del número 23 de los Bulls. Quería ser negro y jugar en la NBA. “Lo primero todavía lo tiene difícil”, llegó a comentar entre risas Esteve en una entrevista en ‘La Razón’.

Su padre ya veía venir que triunfaría. “De pequeño se le veía que tenía algo especial. Cada partido te hacía una cosa diferente. […] Era muy rápido y podía cambiar el partido en treinta segundos. Tenía un don”.

Sus conquistas: desde una actriz a tirarle la caña a Ariana Grande

Su actual novia es propietaria de un restaurante en Badalona. Sin embargo, ha preferido mantenerse en un plano discreto y siempre sale de espaldas en las fotos que el jugador publica en Instagram.

Aunque no han trascendido las parejas de Ricky Rubio, en julio de 2016, fue fotografiado en un conocido restaurante japonés de Madrid, con la actriz canaria Mariam Hernández (de la serie ‘Gym Tony’ y ‘Amar es para siempre’.

Ricky Rubio y la actriz Mariam Hernández, en 2016.

Un año antes, le tiró los tejos a la cantante Ariana Grande a través de las redes sociales. La artista escribió un mensaje a sus fans de Filipinas, diciendo lo emocionada que estaba por reunirse con ellos. EL jugador de la NBA aprovechó para escribirla este mensaje, aprovechando que él estaba en el archipiélago del Pacífico: “¿Has venido a verme? ¡Qué bonito!”. Sin embargo, nunca coincidieron ni recibió respuesta.

Otra vez, una foto con Selena Gomez hizo saltar los rumores en la prensa americana de una posible relación con la cantante y ex de Justin Bieber después de que el baloncestista publicara una foto junto a ella en las redes sociales. La cantante acudió al Target Center a ver un partido y allí coincidió con el español. Ricky le regaló su camiseta y se hizo una foto con ella.

Sus gustos y aficiones

Ricky siente un cariño especial por El Masnou (Maresme) y sus playas. “El Masnou significa casa, significa, si estuviéramos jugando al pilla pilla, que estás a salvo”, confesó.

Su amor por el lugar en el que nació y su defensa a ultranza del medioambiente – suele usar coche eléctrico o bicicleta- le llevó a ayudar a limpiar las playas y las costas de residuos junto a decenas de niños y la empresa Sorea.

No sólo es un hombre respetuoso con el medio ambiente sino que también es un apasionado de la lectura. En ‘La Vanguardia’ destacó algunas de sus lecturas favoritas entre las que se encontraba  el libro 'El monje que vendió su Ferrari' o textos de Rafael Santandreu, psicólogo especialista en las emociones. En cuanto a sus gustos musicales, es fan de Justin Bieber.

Al jugador de baloncesto, Ricky Rubio, le marcó mucho la muerte de su madre a causa del cáncer.

Otra de sus aficiones es el paddle surf. “Soy bastante aficionado al paddle surf. Siempre que puedo vengo a El Masnou a la playa pero ya no juego a voleibol tanto porque las rodillas se resienten”.

Le gusta tanto el mar que si se retirara ahora, “lo primero que haría sería sacarme el carnet de barco para hacer un viaje de tres meses”, ha llegado a declarar.

Ricky creo una fundación de lucha contra el cáncer de pulmón

A pesar de su carrera meteórica, sus padres siempre quisieron que no se le subiera la fama a la cabeza. “Que juegue bien al baloncesto en realidad no significa nada. Lo importante de todo esto es que sea buena persona y que pueda ayudar a los demás. Esta gente que son privilegiados haciendo una cosa que les gusta y que además cobran mucho, tienen que ayudar a la sociedad y devolverle lo que ésta les da”.

Por ello, el jugador de baloncesto creó el año pasado, The Ricky Rubio Foundation, una fundación para informar, prevenir y combatir contra el cáncer de pulmón. “Es una persona muy solidaria. Lo de su madre lo marcó mucho porque estaban muy unidos. Todos lo sufrimos, pero él tuvo el problema de que lo vivió desde la distancia y eso fue muy duro para él. Lo de la Fundación fue una promesa que él hizo a su madre y quería cumplirla. Seguro que su madre ahora está orgullosa de él”, señaló su padre.

La fundación del jugador de baloncesto también promoverá un programa de integración social para jóvenes, a través del baloncesto, en Barcelona y Girona (España) y Salt Lake City, donde también ha realizado una gran labor social participando en campañas para la lucha contra el cáncer.

“La idea de crear mi propia fundación -ha explicado Rubio- me rondaba a menudo por la cabeza, pero nunca encontraba el modo ni el momento para empezar hasta que llegó un punto de inflexión, un día que me marcó. A mi madre le diagnosticaron cáncer de pulmón en el verano de 2012. Los siguientes cuatro años fueron un auténtico infierno. En una de las últimas conversaciones con ella, le prometí que haría todo lo posible para ayudar a otra gente que pasara por situaciones como la que, desgraciadamente, nos tocó vivir. Así pues, aquí estoy, creando una fundación para luchar contra el cáncer y ayudar, sobre todo, a los más pequeños”, explicó.

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