José María Michavila, de 57 años, sale desde hace algunos meses ya con Alejandra de Salinas Harnden, de 40 años, 17 menos que él. El ex ministro de Justicia vuelve a sonreír al amor después de haber tenido una complicada relación con Genoveva Casanova, exmujer de Cayetano Martínez de Irujo, con muchas idas y venidas por sus diferentes estilos de vida. A pesar de la ruptura, se llevan bien y son amigos.
El pasado mes de julio, la revista ‘Love’, ya publicó unas imágenes de Michavila y Alejandra, a la salida del Teatro Real de Madrid pero ahí no se identificó a la mujer que le acompañaba. Ahora sabemos que es Alejandra de Salinas Harnden, a la que conoció el pasado mes de abril, gracias a amigos en común, durante un concierto solidario celebrado en la iglesia de San Andrés Apóstol de Madrid.
Enseguida conectaron y su círculo habla de pareja oficial. “Van en serio, despacio pero en serio. Ella es una mujer estable, muy del estilo de lo que busca Michavila. No van juntos a actos públicos, pero se les ha podido ver ya por algunos restaurantes de la capital”, ha declarado una fuente cercana a ‘Vanitatis’.
¿Quién es ella, a qué se dedica?
Alejandra es una aristócrata de orígenes rusos, su abuela es la princesa Marie Vassiltchikov - que abandonó San Petersburgo en 1919 con su familia y se mudó a Berlín donde se vio sorprendida por la Segunda Guerra Mundial. Marie terminó trabajando en el departamento de Información del Ministerio de Asuntos Exteriores del Tercer Reich, que más tarde se vería implicado en el fallido atentado del conde Von Stauffenberg contra Hitler, la conocida como Operación Valkiria.
La nueva pareja de Michavila habla seis idiomas (ruso, alemán, inglés, francés, español y catalán). Ha vivido en Londres, Milán y París y se dedicó, durante tres años, a ser modelo internacional gracias a su belleza, figura y su 1,80 de estatura.
Es licenciada en Administración y Dirección de Empresas y ha trabajado en Merrill Lynch y en el área de Marketing desde el año 2000 en BlackRock, una empresa de gestión de inversiones estadounidense, con sede central en Nueva York, considerada como la mayor empresa de gestión de activos del mundo. Sin embargo, hace poco decidió dejar esta vida y centrarse en labores solidarias, trabaja en una ONG y canta, o al menos hasta hace poco, en el coro de la iglesia de San Andrés Apóstol, lugar donde se conoció la pareja.
Alejandra tiene dos hijos del que fue su marido Diego Mora-Figueroa, marqués de Saavedra, hijo del ex embajador de España en Londres, Santiago de Mora Figueroa, marqués de Tamarón. La pareja se divorció en 2014, tras doce años de matrimonio. Se casaron en 2002 y la boda contó con un testigo muy especial, el rey Felipe VI, que entonces era príncipe de Asturias.
El monarca tenía una estrecha relación con la familia del novio y entró en la iglesia de la Santa Cruz del brazo de una de las hermanas de la novia, según recogió ‘ABC’ en sus páginas. Después el banquete de la boda se celebró en la Casa de Salinas de Sevilla, propiedad de su familia.
Por su parte, José María Michavila, se quedó viudo hace cuatro años, de su mujer Irene Vázquez, que falleció a las dos semanas de dar a luz a su quinto hijo, Juan, por complicaciones tras el parto. Michavila tiene además otros cuatro hijos: Irene, Beatriz, Pepe y Ana.