Pepe Navarro y su exmujer Lorena Aznar se encuentran en plena batalla judicial. El periodista solicitaba en los tribunales que ella y sus hijos abandonaran el lujoso ático, situado en el paseo de la Castellana, y ella se negaba a abandonar el domicilio.
Finalmente, el juez le ha dado la razón a Pepe Navarro que alegó que tenía que venderlo para poder saldar la deuda de 2,5 millones de euros que tiene pendiente con una entidad bancaria. Antes de separarse los dos estuvieron de acuerdo en venderla pero al iniciar los trámites de separación ella reculó y se negó a ponerla a la venta.
Según han comentado en ‘El programa de Ana Rosa’, “el juez ha obligado la puesta en venta del piso antes del juicio que tienen pendiente en un par de meses para la disolución del matrimonio”.
El acuerdo al que han llegado es que el presentador y su exmujer es que ella tendrá que buscar una nueva residencia en un plazo máximo de dos meses, para ella y los niños, que es el tiempo fijado para que abandonen la casa. Por su parte, Pepe, que quiere lo mejor para sus hijos, está dispuesto a pagar un alquiler que no supere los 1.400 euros al mes.
La casa tiene 428 metros cuadrados, es un dúplex y tiene una maravillosa terraza en forma de ‘L’, con vistas al Paseo de la Castellana. Al parecer, ya tendría un comprador interesado en ella. Es una décima planta, con 171 metros cuadrados útiles en la planta baja y 138 metros cuadrados útiles en la superior.
La distribución de la casa es la siguiente. En la planta baja: Hall de entrada, aseo de cortesía, salón, comedor, biblioteca, despacho, cocina con office. Todo es exterior y con grandes ventanales con vistas a la ciudad.
Mientras que en la primera planta está la habitación principal en suite con cuarto de baño y vestidor incorporados. Además tiene otras dos habitaciones, otro baño, cuarto de plancha y lavado. La vivienda dispone también de dos plazas de garaje y trastero.
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación