El rey Juan Carlos I se encuentra ya en Sanxenxo para participar en las regatas. El rey emérito regresó a España de nuevo este miércoles en un avión privado de 26 millones de euros que procedía de Ginebra (Suiza), un lugar donde pasa ya más tiempo que en Abu Dabi y que podría establecerse como su residencia debido a que está mucho más cerca de España y es donde vive su hija, la infanta Cristina.
El avión aterrizó primero en Vitoria, como estaba previsto y, según os contamos en 'Vozpópuli', ya que el padre del rey Felipe VI iba a someterse a unas revisiones médicas en la clínica privada del doctor Eduardo Anitua, para ver si era 'apto' participar en las regatas. Anitua, es el médico de confianza y amigo íntimo de Juan Carlos I, que estuvo en la fiesta que celebró por todo lo alto el ex monarca en Abu Dabi por su 86 cumpleaños.
Una vez que se le realizó el chequeo y contó con la aprobación médica, volvió a coger el avión para aterrizar en el aeropuerto de Vigo, para después coger el coche y trasladarse a Sanxenxo, a casa de Pedro Campos, presidente del Real Club Náutico de Sanxenxo e íntimo amigo también de Juan Carlos. Aunque estaba previsto que el rey Juan Carlos I saliera a navegar el jueves, se tuvo que cancelar la salida al mar por el mal tiempo, por lo que hoy viernes ha retomado los entrenamientos para las regatas de este fin de semana. Junto al Emérito, se encuentra también su hija, la infanta Elena, que aterrizó el jueves en Vigo.
El rey Juan Carlos I recibe un lametazo del perro de una señora
Al llegar al Club Náutico de Sanxenxo, el rey Juan Carlos I ha protagonizado una divertida anécdota al mediodía. El Emérito llegó en coche y saludó a los medios y a las personas que le estaban esperando pero no hizo ningún tipo de declaración, ya que se ha comprometido con Zarzuela y con su hijo, el rey Felipe VI, a tener un perfil bajo y discreto, sobre todo después de la polémica que supuso el fiestón de su cumpleaños.
Antes de subirse al Bribón, se quedó hablando con los miembros de la tripulación, con su hija mayor, la infanta Elena, y también conversó con una mujer que llevaba un perro en sus brazos. Fue entonces cuando el perro comenzó a lamerle la cara al rey Juan Carlos I, quien tuvo una reacción inesperada. Lejos de enfadarse, el padre del Rey sonrió, se mostró encantado y presumió del amor que le tiene a los animales.
El pasado mes de julio, cuando estuvo en Sanxenxo le ocurrió algo parecido, el perro de un niño le dio un lametazo al Emérito en toda la mejilla.
La infanta Elena ha protagonizado un tierno momento con Juan Carlos I
Otra de las anécdotas del día, fue el tierno momento que han protagonizado el rey Juan Carlos y la infanta Elena en el Club Naútico de Sanxenxo. Una vez que el Emérito se subió al Bribón, la madre de Froilán y Victoria Federica de Marichalar, comenzó a hacerle varias fotografías a su padre con su teléfono móvil.
Juan Carlos I y su hija Elena están muy unidos y se mostraron en todo momento muy sonrientes y cariñosos. La infanta Elena siempre ha demostrado ser un apoyo fundamental para su padre y es la primera que le va a visitar a Abu Dabi siempre que puede.
El rey Juan Carlos I pretende competir en todas las regatas posibles de este año, que están previstas para los meses de abril, mayo, junio, julio y septiembre-octubre, algo que le llevaría a poder permanecer más tiempo en España.
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