Si de algo pueden presumir celebrities como Eva Longoria o Emma Watson es de tener una sonrisa perfecta que han podido conseguir gracias a la ortodoncia invisible. Justin Bieber, por ejemplo, nunca escondió haberse beneficiado de esta técnica, todo lo contrario, se sacaba la férula antes de las entrevistas e incluso habló de su tratamiento en algún vídeo de YouTube. No es el único famoso que ha presumido de ello, Khloé Kardashian alabó a su dentista en Twitter justo después de terminar el tratamiento, y la top model Gisele Bündchen reveló en una revista de moda que la utilizaba por las noches para mantener los dientes bien alineados.
Aunque hablar de ortodoncia invisible suena novedoso, "son técnicas que llevan utilizándose desde hace más de dos décadas" según nos cuenta el doctor Diego Peydro, especialista en Ortodoncia y Ortopedia Dentomaxilofacial. Los beneficios de esta fórmula, frente a los habituales brackets, es que diseñan la sonrisa perfecta de manera prácticamente imperceptible y además recurren a unos sistemas informáticos para planificar el tratamiento de una manera más precisa.
Más del 50% de la atención de la cara la focalizamos en la boca
La imagen es nuestra primera carta de presentación y cuidarla nos puede reportar importantes beneficios. Es importante lo que proyectamos hacia los demás, pero sobre todo vernos bien para tener una buena autoestima. En este sentido, el ortodoncista reconoce que la estética dental juega un papel fundamental en este campo porque "más del 50% de la atención de la cara la focalizamos en la boca. Por tanto, si queremos mejorar nuestra estética facial es importante que nos enfoquemos en nuestra sonrisa."
El secreto de la sonrisa de los famosos
No es una técnica a la que sólo se recurra en el extranjero, en nuestro país también son numerosos los rostros conocidos que han dibujado su sonrisa con este método como Amaia Salamanca o el rey emérito Juan Carlos que han sido fotografiados con estas férulas. Tampoco debemos de caer en el error de pensar que es una fórmula sólo al alcance de los famosos, hoy en Vozpópuli vamos a profundizar en este sistema de corrección dental para que lo conozcas a fondo y estudies la posibilidad de utilizarlo como herramienta para lograr una boca perfecta.
¿Cómo funciona la ortodoncia invisible?
La ortodoncia invisible consiste en un set de alineadores transparentes personalizados para cada paciente. Los alineadores ejercen una presión continua y gradual en los dientes hasta conseguir la sonrisa deseada. Funcionan como unas férulas de quita y pon, y aunque el primer día puede costar, el paciente se adapta rápidamente al movimiento. Los alineadores se tienen que cambiar cada dos semanas y se llevan 22 horas al día.
Resulta un tratamiento eficaz para la mayoría de los problemas estéticos más frecuentes como son los dientes amontonados, dientes apiñados, rotaciones dentales, espacios interdentales o diastemas.
Beneficios de la ortodoncia invisible
Una de las mayores ventajas de la ortodoncia invisible frente a otras técnicas es que permite hacer una previsión precisa de lo que puede suceder durante el tratamiento. El proceso funciona a través de un programa virtual que puede modificarse cuantas veces se quiera, según vaya avanzando el tratamiento.
Según nos traslada Diego Peydro, el proceso comienza con la toma de unos registros dentales a través de unas radiografías y escáneres. El doctor estudia a través de programas informáticos los movimientos que con su uso pueden ir haciendo los dientes y luego se fabrican los alineadores que tendrá que llevar el paciente y que se irán sustituyendo en función de la planificación y el avance del tratamiento.
Al ser extraíble y no tener ninguna parte metálica, este proceso apenas genera molestia. "Con cada alineador movemos los dientes un cuarto de milímetro por lo que el paciente no se suele quejar por dolor. Los primeros días notan cierta incomodidad pero después se pasa" reconoce el doctor.
Los resultados se aprecian en unos 2 meses
Los efectos se advierten rápido. "Para los casos más severos se aprecian en unos 2 o 3 meses aunque lo habitual, en la mayoría de los casos, es que se utilicen entre 14 y 18 meses" señala Peydro que reconoce que, en todo caso, el tiempo concreto depende de cada paciente.
Frente a los brackets esta técnica destaca por que resulta más estética y cómoda, además es más eficaz que aquellos. Sin embargo tendrá que ser un ortodoncista profesional quien determine siempre cuál es el mejor método a seguir para cada caso.
Las dudas más frecuentes
Normalmente cuando nos enfrentamos al dilema de recurrir a este tipo de procedimientos nos surgen una serie de dudas razonables que vamos a intentar resolver de una manera sencilla:
- ¿Puedo comer y beber con los alineadores? Para comer hay que quitárselos. En el caso de la bebida, no hace falta que nos los quitemos para beber agua pero tenemos que tener en cuenta que las bebidas coloreadas, como por ejemplo el café o los refrescos, pueden afectar la transparencia de las fundas.
- ¿Duelen? Es totalmente normal que, durante las primeras horas de llevar alineadores nuevos, éstos sean un poco molestos. Aconsejamos cambiar las fundas antes de ir a dormir para que nuestro cuerpo se vaya aclimatando a ellos durante el sueño. Con las horas se va reduciendo esta presión. Una vez superado este punto, no hay dolor alguno durante el tratamiento.
- ¿Se nota al hablar? No necesariamente. Los primeros días de tratamiento se puede sentir un poco de dificultad al hablar. Pero eso se pasa al cabo de los días, una vez la lengua se acostumbra a llevar los alineadores puestos.
- ¿Los alineadores pierden transparencia? Es normal que en los últimos días de su uso, justo antes de que toque renovarlos, hayan tomado un poco de color dada la limpieza y la propia saliva de la boca. Para evitarlo, la mejor solución es realizar una limpieza perfecta.
3 pasos para lograr una sonrisa de 10
Dentro de la ortodoncia invisible nos vamos a fijar en el sistema Impress, una nueva generación que combina la tecnología más avanzada con una atención personalizada de forma on-line sin movernos de casa. Este nuevo paso surgió al pensar que todo el mundo merece sonreír con total libertad y confianza y para conseguir esa sonrisa soñada se adaptan al estilo de vida actual ofreciendo una atención digital que nos ahorra las visitas al dentista.
El primer paso que el paciente debe realizar es una primera consulta sin compromiso en el que se le informará de en qué consiste el tratamiento. Después se procede a un primera radiografía para analizar el estado actual de la boca en la que se determinará si el paciente es apto para comenzar el proceso o debe de realizarse antes algún tipo de procedimiento dental previo. Después de la radiografía se realiza un vídeo 3D en el que se simulan los movimientos que los dientes tendrán desde el estado inicial hasta terminar el tratamiento. Esta visita personalizada con el especialista determina el tiempo de tratamiento en cada caso.
El segundo paso comienza con la entrega de los alineadores los cuáles podemos recoger en la clínica o que se nos envíen a la dirección que queramos. Para mayor facilidad, el kit incluye vídeos explicativos e instrucciones para que el paciente pueda llevar a cabo el tratamiento desde cualquier lugar. Estos alineadores se tendrán que ir cambiando cada dos semanas siguiendo las instrucciones del doctor.
Después únicamente queda realizar el seguimiento para comprobar que todo evoluciona de la manera prevista. Este seguimiento se puede realizar de manera presencial en las clínicas o con conexiones virtuales desde casa. En este segundo caso, el usuario deberá ir colgando la evolución de su sonrisa en una aplicación móvil y estas fotos son evaluadas por el ortodoncista. Esta app además sirve para interactuar con el doctor siempre que nos surjan dudas sin necesidad de llamar o trasladarnos a ningún centro.
El sistema Impress tiene un precio de 1.975€ que incluye todo el tratamiento, el seguimiento digital personalizado y todas las visitas tanto digitales como presenciales que sean necesarias.
Un blanqueamiento casero para rematar la sonrisa
A medida que vamos cumpliendo años nuestros dientes van perdiendo su blancura y ya no lucen tan radiantes como antes. Hay muchas razones por las cuales los dientes comienzan a amarillear, desde una falta de higiene hasta el tabaco pasando por la toma de ciertas bebidas como el vino o el té. Sea cual sea la causa, este proceso se puede revertir de una manera muy sencilla haciendo uso de tiras blanqueadoras.
Las tiras blanqueadoras son mucho más efectivas que los dentífricos blanqueadores porque actúan en las manchas que se forman debajo de la superficie de los dientes. Además son una solución fácil de usar en casa y sus resultados se empiezan a notar desde la primera semana.
¿Cómo se utilizan las tiras blanqueadoras?
Lo primero que tenemos que hacer es lavarnos bien los dientes para que no queden partículas ni restos desaliva. En este cepillado previo no hay que usar pasta de dientes, sólo usar el cepillo con agua.
Después seca bien tus manos antes de abrir el sobre y extraer la tira blanqueadora. Los dientes también tienen que estar secos porque si hay saliva la tira no se adherirá bien y perderá eficacia. Para secarlos puedes recurrir a un pañuelo de papel.
Primero hay que colocar la tira más corta que es la que corresponde a la mandíbula inferior, despega la tira de plástico protectora y coloca la tira de forma que la parte con gel quede en contacto con los dientes presionando suavemente con los dedos para que quede bien pegada y dobla el resto de la tira bajo los dientes para que la sujeción sea perfecta. Un truco es doblar la tira antes de usarla por el centro para marcar el medio y así coincidir esa doblez con la mitad de la dentadura.
Hay que dejarlas trabajar el tiempo que corresponda en cada caso y que encontraremos en las instrucciones del fabricante. Usarlas más tiempo de lo debido puede producir sensibilidad dental o problemas en las encías. Es normal que durante el proceso notemos que la saliva aumenta ya que nuestra boca responde de esta manera al notar un objeto extraño en contacto. La saliva puede reaccionar con el peróxido de hidrógeno de la tira y producir una espuma, no hay que alarmarse porque es algo habitual y que no afecta a la salud. Si la sujeción de la tira no es perfecta, es mejor cerrar la boca y succionar o usar las uñas para encajarlas en los espacios interdentales antes que tocar demasiado las tiras con la lengua.
Después de retirarlas, enjuaga tu boca con agua y lávate bien las manos. Las tiras hay que desecharlas porque son de un único uso.
Ya has visto lo sencillo que puede ser lograr una sonrisa perfecta y que puede conseguirse sin moverte de tu casa. ¿Te convence?
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