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El dineral que cobra Pablo Motos y su último capricho millonario

El valenciano es uno de los presentadores mejor pagados de la televisión, una vida que nada tiene que ver con su pasado como limpiacristales

Pablo Motos, de 54 años, lleva al frente del exitoso programa ‘El hormiguero’ trece años. Este formato le ha reportado grandes beneficios a su productora por sus buenas audiencias, como la obtenida con la entrevista de Santiago Abascal, líder de Vox, que le llevó a tener su tercer mejor dato histórico, con más de cuatro millones de espectadores, a pesar del boicot que sufrió en redes sociales por llevar a este político al programa.

‘El hormiguero’ nació en 2006, a la vez que la cadena Cuatro. En aquel entonces era de Gestmusic pero un año después Pablo Motos y Jorge Salvador, fundaron la productora '7 y acción', que se encargó de producir el talk show desde entonces. Mediaset pagaba a la productora de Motos, 75.000 euros por programa en 2010.

En 2011, con la fusión de Cuatro con Mediaset, comenzaron a tener buenos datos de audiencia. Sin embargo, fue en este año cuando se produce la ruptura entre Pablo Motos y Paolo Vasile, ya que el presentador pidió 90.000 euros por programa y un contrato por tres temporadas, algo que el italiano vio desmesurado para un acces prime time. Fue entonces cuando ‘El hormiguero’ pasó a emitirse en Antena 3, del grupo Atresmedia, tras aceptar una oferta que en su día se describió como “indecente”.

La mujer de Pablo Motos e hijas de ésta trabajan en ‘El Hormiguero’

El presentador de ‘El hormiguero’ tiene en su plantilla a su pareja, con la que lleva más de 20 años, y a las hijas de ésta (que no son de Motos). Las tres trabajan con Pablo. Su mujer Laura Llopis es la jefa de guiones del programa, ya trabajó con el valenciano en las mañanas de Radio 80.

Por su parte, sus hijas, Cristina y Laura Correa, forman parte del equipo del programa. Una es guionista, mientras que la otra trabaja en escenografía.

Pablo Motos y su mujer, Laura Llopis.

El sueldo de Pablo Motos y lo que factura su empresa

‘El hormiguero’ da trabajo a un centenar de personas y factura 30 millones de euros anuales. Los beneficios de la empresa de Pablo Motos rondan los 10 millones por ejercicio. Unas cifras que le sitúan como uno de los presentadores mejor pagados de la televisión. Su sueldo estaría en torno a los cuatro millones de euros por cada temporada de ‘El hormiguero’.

La productora de ‘El hormiguero’,’ 7 y acción’, -que también ha producido espacios como ‘Tonterías las justas’, ‘Otra movida’ o ‘Así nos va’-, no es la única de la que Pablo Motos es titular. También está, por ejemplo, Japala Japala, cuya actividad es la realización de eventos, publicidad y contenidos en medios audiovisuales. Una empresa que antes dirigía Motos con su esposa, Laura Llopis, pero que actualmente sólo está Motos como administrador único.

Pablo Motos y Santiago Abascal en 'El hormiguero'.

El capital social de esta sociedad asciende a más de 20 millones de euros, según publica ‘El País’. Además hay que sumarle los beneficios que obtiene de haber exportado ‘El hormiguero’ a países como Chile o China.

Las propiedades de Motos y su último capricho

Pablo Motos y su mujer Laura Llopis se trasladaron en 2016 a una casa espectacular. Un piso de 300 metros cuadrados en pleno barrio de Salamanca, cerca del parque de El Retiro, que adquirió por un 1,5 millones de euros y que está valorado en más de dos millones de euros.

En Madrid tiene además un segundo piso, donde están domiciliadas sus empresas. Además, el presentador posee varias propiedades en Valencia dos viviendas, dos fincas y una casa de campo.

Pablo Motos suele pasar sus vacaciones en Jávea.

Demás, Pablo Motos y su socio, Jorge Salvador han adquirido varias propiedades en una zona exclusiva con espectaculares vistas al Mediterráneo, en una urbanización cerca del Cabo de la Nao, en Jávea, su lugar habitual de vacaciones.

Se trata de un conjunto de villas que se construyeron en los años 80, aunque se han ido modernizando con el paso del tiempo. Una parcela de unos 800 metros cuadrados, piscina y barbacoa. Las compraron al 50% y, según las agencias de la zona, tienen un enorme potencial tanto para la venta como para el alquiler. Podrían venderse por un millón de euros, aunque la mayoría se oferta por unos 600.000. 

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