Como si de una película romántica se tratase, así ha comenzado el 2023 para Tamara Falcó. Tras su dramática ruptura con Íñigo Onieva el pasado mes de septiembre, cuando la publicación de una infidelidad dinamitó su relación y su reciente compromiso, la marquesa de Griñón aseguró que nunca perdonaría la deslealtad de su expareja. Algo que pasados los meses sí ha hecho reconciliándose con el empresario, y despertando los rumores y sospechas de quienes dejan entrever que todo ha podido ser parte de un guion perfectamente diseñado.
Desde que la famosa relación saltara por los aires, eran muchos los que daban por hecho que, tarde o temprano, Tamara Falcó perdonaría a Íñigo Onieva. Una teoría que perdió seguidores tras la aparición en escena de Hugo Arévalo, de quien la hija de Isabel Preysler dijo era “un hombre 10”, pero que días antes de que terminara el 2022 recobró fuerza tras algunos encuentros secretos de la expareja.
De esta manera, el nuevo año comenzó con la confirmación de lo que para muchos era la ‘crónica de una reconciliación anunciada’. Tamara Falcó e Íñigo Onieva vuelven a ser pareja, y son muchos los que sospechan que su crisis ha podido ser un “montaje” o una “tomadura de pelo”.
La crisis y reconciliación de Tamara Falcó e Íñigo Onieva, ¿realidad o montaje?
Así lo han definido diferentes fuentes que desde hace días hacen públicas sus sospechas. Como era de esperar, las redes sociales se han convertido en uno de los escenarios donde los usuarios han compartido sus comentarios sobre esta reconciliación. Una reconciliación que ha despertado toda clase de dudas y críticas, recordando el momento estelar de Tamara Falcó y su “me da igual que hayan sido seis segundos o un nanosegundo en el metaverso, como esto sea verdad, esto se acaba”.
Una frase que le sirvió para confirmar su ruptura con Íñigo Onieva el pasado mes de septiembre y que también recuerda ahora Carmen Lomana en ‘La Razón’ donde asegura: “Lo de Tamara e Íñigo es el colmo de la tomadura de pelo. Nunca me creí la puesta en escena en el Teatro Real. La novia engañada estaba radiante, sonriente, maquilladísima y decía por esa boquita frases que no tenía ni idea de lo que significaban, pero quedaban muy ‘cool’” y añade: “Una mujer enamorada a la que su novio la está engañando con otra, no tiene cuerpo para ir al Teatro Real a montar semejante numerito”.
Así, la empresaria y colaboradora de televisión desconfía de la crisis que vivió la pareja y de su reciente reconciliación "Siempre tuve claro que esto sería así. Lo sabía yo y lo sabían ellos. Esto es un negocio y como tal se manejan los hilos y los tiempos dirigidos por ‘la jefa’ Preysler”.
“Siempre mantuve que en poco tiempo, no más de tres meses, volvería. Y así ha sido” apunta Carmen Lomana, que recuerda también que “en el intermedio de esta obra de teatro se utilizó a un amigo de toda la vida, Hugo Arévalo, haciendo creer que era una nueva ilusión. Mientras Íñigo aparentemente se hacía el indignado y llamaba “rata” a su amigo”.
Pero la teoría de que la ‘guionización’ de la historia entre Tamara Falcó e Íñigo Onieva no solo es de Carmen Lomana. Además de los anónimos que no dudan en darle vida y fuerza a estos rumores en las redes sociales, desde ‘La Otra Crónica’ comparten las sospechas.
“Sospechas de una tomadura de pelo guionizada y millonaria”. Así recogen desde ‘El Mundo’ las conjeturas sobre esta relación, apoyándose en el rendimiento económico que la marquesa de Griñón habría obtenido durante los tres meses que ha durado su separación.
“Como a la gente le gustan las teorías de conspiración, planea la sospecha de que este culebrón ha sido un montaje, una escenificación en cinco actos – los cuernos, el despecho, el acercamiento y los que están por venir, el noviazgo renovado y la boda – para obtener un beneficio sin romper nunca la pareja, que es la base del negocio” apuntan.
Y es que, como señalan desde el diario, “los resultados están ahí: (Tamara Falcó) ha sido la persona más buscada en Google en España en 2022, lo que se traduce en un auge de su perfil público y una revisión de su caché. Si antes de la crisis cobraba 100.000 euros por campaña, esas tarifas se han tenido que revisar al alza”.
Pero no solo se ponen en duda los posibles intereses de la hija de Isabel Preysler, también los de su pareja. Así, el citado medio habla del “papel ejemplar – casi guionizado – de Íñigo”, de quien señalan: “No se ha lucrado porque el corazón no es su negocio (todavía), pero Tamara sí ha estado sumando muchas columnas al Excel con sus ingresos”.
Así, y plasmadas las opiniones y teorías que circulan tanto por las redes sociales como por los mentideros populares, son muchos los que se preguntan qué parte habrá sido cierta de toda esta historia de amor e infidelidades con final feliz y cuál fruto de un posible guion.
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