Han pasado tan solo tres semanas desde que se hiciera pública la separación de Yolanda Díaz y su marido, Andrés Meizoso. Una noticia que el entorno de la vicepresidenta segunda del Gobierno confirmaba tras días de rumores, alimentados por la entrevista que ofreció en televisión, desvelando detalles de su vida “monomarental” en Madrid, y sobre la que la política no ha querido pronunciarse. Algo que no ha impedido que se hable de esta nueva etapa en su vida.
Fue el pasado 3 de febrero cuando, fuentes cercanas a Yolanda Díaz señalaban a ‘El Mundo’: “Se han distanciado, pero siguen siendo buenos amigos, aunque ya no convivían desde hace tiempo por una cuestión de trabajo y de pareja”. Unas palabras con las que se confirmaba que, tras 20 años de matrimonio, la ministra de Trabajo y el padre de su hija han emprendido caminos por separado. Una nueva vida para la líder de Sumar, sobre la que su entorno ha desvelado nuevos detalles.
Así es la nueva vida de soltera de Yolanda Díaz tras su separación
Instalada en Madrid desde que ocupó su cargo en el Gobierno, y aunque asegura echar mucho de menos el mar y su Galicia natal, Yolanda Díaz “hace esfuerzos sobrehumanos para conciliar y pasar con su hija todo el tiempo posible, bien en el ministerio o en la vivienda oficial a su disposición, bien dejando que la acompañe a sus actos”. Así lo apuntan fuentes próximas a la política a ‘La Razón’, donde desvelan cómo Carmela, que cumplirá doce años en marzo, se ha convertido en el principal apoyo de la política.
Y es que, según señalan en el diario, Carmela acompaña a su madre siempre que puede. “Fuentes muy próximas a Díaz cuentan cómo planifica su agenda, sobre todo los fines de semana que le corresponde estar con ella, tratando de compatibilizar sus horarios como ministra y líder de partido con sus cuidad os maternales” señalan desvelando que incluso acudió con Yolanda Díaz a los pasados Premios Goya que se celebraron en Valladolid. “Carmela se desenvuelve con soltura en esos ambientes políticos y sociales”, explican.
Pero además de contar con el apoyo de su hija, Yolanda Díaz tiene con ella a uno de sus pilares: “Uno de sus puntuales en su vida, más como madre divorciada, es su padre, Suso, un histórico sindicalista gallego”. “Carmela, que pasa muchos ratos con el abuelo, lleva el nombre de su esposa, que falleció repentinamente en 2013 a los 66 años” apunta el citado medio.
Así, y tras el regreso de Andrés Meizoso a Galicia, donde trabaja en Ferrol para la naviera Navantia, Yolanda Díaz se apoya principalmente en su hija y su padre tras la ruptura. Una ruptura que, aunque sorprendió a muchos, no habría sido ninguna novedad para su entorno, que ha desvelado al diario que la pareja arrastraba problemas desde hacía tiempo.
“La noticia de su divorcio formal no ha sorprendido ni a cercanos ni a extraños. Era vox populi. Díaz llevaba alejada de su marido al menos un año y haciendo vida social al margen de Meizoso” apuntan sus allegados en Galicia, quienes también señalan: “Ya se habían repartido previamente las responsabilidades de la crianza de su hija, Carmela”.
Los motivos de la ruptura de Yolanda Díaz y Andrés Meizoso
Como decíamos, ni Yolanda Díaz, ni nadie de su equipo de prensa, ha querido hablar sobre la separación de la ministra de Trabajo. Una ruptura que aseguran ha sido de mutuo acuerdo, y tras la que la expareja sigue manteniendo una excelente relación.
Así lo señalaron fuentes cercanas a Yolanda Díaz al diario ‘El Mundo’, donde apuntaron a los motivos que les habrían llevado a emprender caminos por separado: “Ella trabaja muchísimas horas, por lo que se han distanciado. Pero se llevan genial, son amigos y siguen comportándose como una familia. No hay ningún mal rollo, ni terceras personas”.
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