El relevo al frente del supervisor llevará consigo también la salida de la vicepresidencia de Fernando Restoy, nombrado para este cargo en octubre de 2008. La ley permitiría la prórroga durante cuatro años más de su mandato, pero en el PP se considera improbable. A diferencia del Banco de España, donde hasta la llegada de Fernández Ordóñez operaba la tradición de pactar los nombramientos de primero y segundo nivel con el principal partido de la oposición, en el caso de la CNMV nunca ha pesado este criterio, por lo que el Gobierno tiene las manos libres.
Julio Segura debe cesar el 6 octubre de forma obligada ya que arrastra en el calendario parte del mandato que agotó Manuel Conthe antes de su dimisión en abril de 2007. La ley que regula el supervisor establece cuatro años de mandato, prorrogables por otros cuatro. Segura superará en otoño estos plazos.
La renovación del resto del equipo de dirección de la Comisión Nacional del Mercado de Valores estará condicionada también por la ley que rige el funcionamiento de este organismo. Los tres consejeros que no son natos, Luis Pedroche, Ana Isabel Fernández Álvarez y Oriol Amat, no podrán ser relevados hasta 2014 y 2015, cuando cumplan los cuatro años de estancia en el Consejo del supervisor. De este órgano de dirección forman parte también dos miembros natos, el secretario general del Tesoro, que acaba de ser sustituido, y el subgobernador del Banco de España. Este último, Francisco Javier Aríztegui, será relevado antes del verano, en coincidencia con la salida de Miguel Ángel Fernández Ordóñez del edificio de Alcalá.
La elección de Elvira Rodríguez para el cargo se debe, según fuentes gubernamentales, a su alta preparación técnica y a la plena confianza que tiene en ella Mariano Rajoy. Antes de ser ministra de Medio Ambiente fue secretaria de Estado de Presupuestos, interventora y auditora. Acumula también una amplia experiencia parlamentaria en las comisiones de Economía y Presupuestos del Congreso. Fue consejera de Transportes de la comunidad de Madrid.
Durante los cinco años largos que Julio Segura ha permanecido al frente de la CNMV se ha creado por primera vez un mecanismo para rendir cuentas ante los supervisados, se ha establecido un plan de actividades anual y se ha aumentado la transparencia mediante la difusión de los criterios de supervisión. También se han extendido al máximo el perímetro de alertas para proteger a los inversores, se ha reformado el sistema de compensaciones y registros y se ha ganado presencia internacional. No obstante, en el PP se advierte que queda todavía mucho por hacer en el terreno, sobre todo, de la transparencia en los mercados.