El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, aseguró este lunes en el Senado que una de las prioridades del Gobierno es llevar la alta velocidad hasta Granada. Un anuncio que coincidía en el tiempo con un nuevo contratiempo precisamente para la línea que conectará la capital andaluza con la provincia de Málaga, toda vez que Adif ha resuelto desistir de un contrato para el mantenimiento de diversas instalaciones del trayecto.
Como otros proyectos en marcha de la red de alta velocidad, la línea Antequera-Granada se ha visto afectada tanto por los recortes presupuestarios de Fomento como por las múltiples incidencias con las constructoras que se están registrando en los contratos ya adjudicados.
Sin embargo, el último revés ha llegado directamente de la Administración. Catorce meses después de su licitación, Adif decidió desistir de adjudicar el contrato para el mantenimiento de las instalaciones contempladas en el proyecto constructivo de las instalaciones de línea aérea de contacto y sistemas asociados de la línea Antequera-Granada.
El contrato estaba valorado en 3,5 millones de euros y fue licitado a finales de octubre de 2015. El paso del tiempo y, sobre todo, el largo periodo del Gobierno en funciones, ha resultado fatal para la adjudicación, de la que ha terminado desistiendo Adif.
Proyectos en problemas
El Ejecutivo, ahora sí en firme, trabaja denodadamente para tratar de ajustar sus cifras para cumplir con el mandato de la Unión Europea en cuanto al déficit. De este modo, la obra pública seguirá en precario, como los últimos años, hasta que el desequilibrio de las cuentas públicas se sitúe por debajo del 3%.
Durante su comparecencia en la Comisión de Fomento del Senado, De la Serna anunció una próxima visita a Granada en la que dará fechas y plazos concretos para la llegada de la alta velocidad a la capital andaluza y aseguró que el Gobierno hará todo lo posible porque se produzca “en el menor tiempo posible”.
También se ha referido a la existencia de determinados problemas técnicos, que habría retrasado el objetivo temporal de culminar la obra, aunque ha asegurado que ahora ya están resueltos.
No obstante, todo parece indicar que los de índole técnica no son los únicos obstáculos que la línea Antequera-Granada tiene por delante para llegar a buen puerto. Eso sí, no es la única que se encuentra en esta situación. Sin ir más lejos, el corredor mediterráneo, uno de los proyectos más ambiciosos, presenta un avance ridículo en sus obras, víctima de los citados recortes.
También atraviesan problemas el AVE a Extremadura y el proyecto de la Y vasca para unir a las tres capitales de Euskadi a través de la alta velocidad. El Gobierno mantiene el objetivo de tener lista la línea completa a Galicia para 2018, un compromiso ratificado por De la Serna en su visita a esta comunidad autónoma.
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