AENA estima que cerrará el ejercicio 2019 con un beneficio por encima de los 1.300 millones de euros, un 3% más que las estimaciones para el conjunto de este año y que, además, repartirá un dividendo superior a los 1.000 millones de euros. Las cifras se incluyen en el plan estratégico hasta 2021 de la compañía, cuyos detalles se han hecho públicos este miércoles después de que el consejo lo aprobara a finales del pasado mes de mayo.
El gestor aeroportuario prevé un incremento de la cifra de pasajeros notablemente más moderado que el esperado para 2018. Así, la hoja de ruta de la compañía pasa por que en 2019 la cifra de usuarios de su red de aeropuertos se incremente un 2%, hasta los 268,1 millones. Para 2018, las estimaciones se mantienen en un incremento del 5,5% respecto a 2017, lo que supone cerrar el año con un nuevo récord histórico de casi 263 millones de pasajeros.
El consejo de administración de AENA aprobó el plan estratégico en su reunión del mes de mayo, apenas unos días antes de que tuviera lugar la moción de censura en el Congreso de los Diputados que concluyó con el cambio de Gobierno y la llegada del actual presidente, Pedro Sánchez.
Esta circunstancia provocó también el relevo en la presidencia de AENA, con la salida de Jaime García-Legaz y su relevo a cargo de Maurici Lucena. La presentación al mercado de los detalles del plan estratégico, que estaba programada para la primera semana de julio, se aplazó hasta que finalmente se fijó la fecha de este miércoles.
En su primera intervención ante los mercados, con motivo de la presentación de resultados del primer semestre, Lucena aseguró que las líneas fundamentales del plan aprobado por el anterior consejo de AENA permanecerían sin cambios y que los detalles se conocerían una vez hubiera terminado de tomar los mandos de la compañía.
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