Alfredo Sáenz continuará como consejero delegado del Santander. El Banco de España no tomará ningún tipo de actuación sobre la actual situación del número dos del Santander hasta que no exista una decisión final sobre su indulto por parte de la Sala Contencioso-Administrativa del Tribunal Supremo. "Cuando se produza esa resolución, Sáenz puede estar incluso jubilado", aseguran fuentes jurídicas.
El razonamiento es que el indulto que le concedió el Gobierno de Zapatero el pasado 25 de noviembre se mantiene vigente y éste incluye que Sáenz pueda continuar ejerciendo como banquero. Esta norma prevalece sobre el auto dictado, el pasado lunes, por la sala de lo penal del Supremo en el que se asegura que el indulto fue legal pero "no borra la existencia misma de la sentencia condenatoria ni el efecto de un antecedente penal, en todo caso, pues, subsistente y resistente al indulto". Esta cita aparece en el auto que rechaza una querella contra Zapatero y el exministro de Justicia, Francisco Caamaño.
Según el artículo 2.2 de la norma sobre creación de bancos del Banco de España, "concurre honorabilidad comercial y profesional en quienes hayan venido observando una trayectoria personal de respeto a las leyes mercantiles u otras que regulan la actividad económica y la vida de los negocios, así como a las buenas prácticas comerciales, financieras y bancarias. En todo caso, se entenderá que carecen de tal honorabilidad quienes, en España o en el extranjero, tengan antecedentes penales por delitos dolosos, estén inhabilitados para ejercer cargos públicos o de administración o dirección de entidades financieras o estén inhabilitados conforme a la Ley 22/2003, de 9 de julio, Concursal, mientras no haya concluido el período de inhabilitación fijado en la sentencia de calificación del concurso y los quebrados y concursados no rehabilitados en procedimientos concursales anteriores a la entrada en vigor de la referida ley".
Amparándose en este artículo, el diario El Mundo informaba hoy que el Banco de España tendría que solicitar al Santander el relevo de Alfredo Saénz. Sin embargo, tanto la defensa del banquero como fuentes jurídicas aseguran que el supervisor no tendrá que tomar ninguna medida hasta que no haya sentencia firme por parte de la sala contencioso-administrativo.
Alfredo Sáenz fue condenado en febrero del año pasado por un delito de acusación falsa, con la pena accesoria de suspensión de profesión relacionado con entidades bancarias. Estos hechos se remontan al tiempo en el que Sáenz era presidente de Banesto, hacia 1994.
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