El Big Data era hasta no hace mucho una entelequia, un concepto, pero ya es una realidad. En marzo lo será para los usuarios de transporte público de San Sebastián. DonostiaBus (Dbus) trabaja en un algoritmo para predecir la demanda de afluencia de viajeros, con el fin de ofrecer un mejor servicio y estimular el uso de este tipo de transporte.
El sistema se nutrirá de los datos almacenados durante 15 años por de Dbus, además de trabajar en entornos inéditos hasta ahora, como lo es Internet o las webs de predicciones meteorológicas.
"La idea es que el algoritmo aprenda cada día. A los datos históricos que poseemos, y con los que trabajará, hay que sumar aquellos que obtendrá a través de la previsión meteorológica o de los eventos como partidos de fútbol o conciertos que se sucedan en la Donosti. Y no sólo eso, también se analizarán en redes sociales (RRSS) aquellos espectáculos de menor escala pero que también impacten en el transporte público", asegura Javier Vallejo, director adjunto de Dbus y responsable de operaciones y planificación de la compañía.
Un sistema de sensores de visión artificial permitirá informar del número de personas que esperan en una parada para enviar más autobuses a cubrir la demanda si fuese necesario
Todo afecta. No hay el mismo uso de los autobuses de Dbus cuando es fin de semana que en verano o durante las fiestas navideñas. La situación más crítica con el colapso del transporte público es la lluvia.
"Un día normal hay 92.000 accesos, un día lluvioso 95.000, por eso es tan importante anticiparse, para saber cuántos autobuses necesitaremos para cubrir la demanda, que viene principalmente de quienes reniegan desplazarse andando o en bici", explica Vallejo.
El algoritmo buscará en Internet, en redes sociales y sitios públicos, por palabras clave que permitirán saber cuándo va a producirse cualquier hecho inusual. 'Concierto', 'manifestación' o 'festivo' son algunos de los ejemplos.
Contador de personas en paradas
Las paradas de Dbus contarán también a partir de marzo con sensores de visión artificial. El objetivo, saber cuántas personas hay en cada parada de autobús.
"Hasta ahora nos avisaban los conductores de la afluencia masiva de personas en cada parada. Ahora un sistema de sensores de visión artificial, que no envían imágenes sino datos, nos dirán las personas que esperan, y lo hará en tiempo real. Esto nos permitirá enviar uno, dos o tres autobuses, articulados o sencillos, para hacer frente a esa necesidad concreta", apunta Vallejo.
En primavera el sistema se instalará en 5 paradas de autobús y, en función de su comportamiento, se irá extendiendo paulatinamente a otras 115 paradas de la red, de un total de 540 paradas.
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