La inmobiliaria Colonial ha cerrado el primer semestre del año con un resultado neto de 162 millones de euros, frente a los 26 millones que perdió en el mismo período de 2020, gracias al impacto de las desinversiones y la aceleración del programa de renovaciones.
"Tenemos un nivel de actividad muy saludable que dibuja un escenario de futuro que nos parece muy positivo y sobre el cual estamos muy esperanzados", ha señalado este jueves en rueda de prensa su presidente ejecutivo, Juan José Brugera, después de que la compañía haya detallado sus resultados a la CNMV.
La compañía ha firmado hasta junio contratos de alquiler por casi 60.000 metros cuadrados, una cifra un 42 % por encima de los 42.000 metros cuadrados del mismo período del pasado año, y de los cuales alrededor de 33.000 son renovaciones y 26.000 nuevos contratos, lo que para Brugera refleja la "solidez y robustez del mercado prime".
"A pesar de la pandemia, las empresas están siendo mucho más activas que el año pasado y, en volumen de actividad, en el segundo trimestre mantenemos un ritmo mucho mayor que el año pasado. Estamos firmando un 14% por encima de los niveles de alquiler que teníamos registrados a 31 de diciembre", ha explicado, por su parte, el consejero delegado, Pere Viñolas.
Todo ello ha llevado a la socimi a cerrar el primer semestre con unos ingresos por rentas de 155 millones de euros, un 13% menos que en el mismo periodo de 2020, principalmente debido a las desinversiones de activos no estratégicos ejecutadas entre finales del pasado año y principios de este, y a la aceleración del programa de renovación para reposicionar activos.
Esta gestión activa de la cartera está teniendo un impacto temporal a corto plazo, si bien la compañía espera que asegure una mayor calidad del portafolio y una mayor potencialidad de creación de valor fruto del reposicionamiento de cada activo.
En términos comparables, es decir, ajustando inversiones, desinversiones y el efecto de los proyectos y activos en reposicionamiento, los ingresos por rentas aumentan un 2% respecto al mismo periodo del año anterior.
Fuerte crecimiento en París
El aumento de las rentas netas en relación al primer semestre de 2020 se ha visto impulsado por un incremento en el portafolio de París, que ha crecido un 5,3% y ha compensado la corrección temporal en la cartera de Barcelona.
"Si tenemos en cuenta los tres motores, el de las grandes desinversiones, el de las renovaciones y el del potencial de crecimiento de rentas, mantenemos intacta nuestra aspiración de que en el futuro podamos añadir 150 millones de rentas al volumen que tenemos en la actualidad", ha agregado Viñolas.
El valor de los activos del grupo a cierre del primer semestre asciende a 12.017 millones de euros, una cifra ligeramente superior a la de 2020. Los directivos han remarcado la vuelta al crecimiento del grupo y su apuesta por los activos "prime" de máxima calidad en detrimento de activos secundarios.
La desocupación total del Grupo Colonial a cierre del primer semestre se ha situado en el 5%, gracias a la mejora en el mercado de París, que ha compensado el incremento temporal de desocupación en Barcelona y Madrid por las entradas en explotación de reposicionamientos, así como por rotación de clientes.
Viñolas se ha mostrado confiado en cerrar el año "en línea" con los resultados actuales y ha aseverado que aunque la apuesta de Colonial es "clara" en relación a los activos que buscan, no son "puristas" y están abiertos a "contemplar cualquier movimiento más allá".