La rebaja de salarios como fórmula para ganar competitividad ha quedado anulada con la llegada del verano. Los salarios han seguido cayendo pero las cifras demuestran que la economía española no sólo no está ganando competitividad sino que la pierde a un ritmo del 0,9% frente a 2012. Dos factores explican que España esté desandando el camino: primero, el encarecimiento del euro (0,5%) y segundo, las subidas de precios fruto del aumento de impuestos y del aumento de márgenes de las empresas (0,4%).
En la batalla por el mercado europeo, los productos Made in Spain se están encareciendo más que en ningún país de la Zona Euro, según refleja el Informe Trimestral de Competitividad que elabora el Ministerio de Economía referente al segundo trimestre de 2013. “Desde agosto de 2012 la tasa interanual de España se sitúa por encima de la de la Zona Euro”.
Los márgenes de la distribución de gasolinas han subido un 31% en cuatro meses
El impacto de la subida de impuestos se está dejando notar en los precios pero están siendo también los crecientes márgenes de algunas empresas los que encarecen el indicador más importante para medir la competitividad española: los precios. Así, por ejemplo, los márgenes brutos de la distribución de gasolina han subido un 31% hasta abril mientras que los del gasóleo han crecido un 13%. El propio Banco Central Europeo ha advertido al Ejecutivo español para que vigile algunos márgenes empresariales que, a la luz de los últimos datos, explican la mitad del encarecimiento y, sobre todo, anulan el esfuerzo hecho por los trabajadores que –según el cuadro macroeconómico del Ejecutivo—vieron como la remuneración por asalariado caía un 0,3% en 2012.
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La pérdida de competitividad de la economía española se deja sentir también fuera de las fronteras europeas. La fortaleza del euro explica ese retroceso en los mercados internacionales. El euro se ha apreciado un 4,9% frente a la libra esterlina, un 2,3% frente a la corona checa y un 0,6% frente al forinto húngaro hasta el mes de junio, mercados a los que exporta nuestro país.
La versión oficial frente al "efecto pobreza"
El Ejecutivo sostiene que España gana competitividad porque toma como referencia no el precio de los productos made in Spain sino el "valor unitario de la exportación" que no considera todos los productos sino sólo los de una cesta de productos seleccionados como termómetro de la exportación.
La lectura de esa porción de los datos obvia el impacto en el mercado interior donde la subida de precios corre paralela a una bajada de salarios dejando como resultado un "efecto pobreza" entre los trabajadores. Según los datos del INE, el coste por trabajador ha caído hasta los 30.667,43 euros. La mayor caída la registra, precisamente, el sector servicios que incluye el turismo en el que los salarios bajan un 1,1% y en el que el salario medio de la hostelería se sitúa ya en 18.367,80 euros anuales.
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