Economía

Díaz vende a ERC que la reforma laboral bajará la temporalidad a niveles de Alemania

A una semana de la votación en el Congreso del Real Decreto-ley de la reforma laboral, Yolanda Díaz lanza la ofensiva final, centrada en atraer a los socios de Gobierno

A una semana de la votación en el Congreso del Real Decreto-ley de la reforma laboral, Yolanda Díaz lanza la ofensiva final, centrada en atraer a los socios de Gobierno a convalidarla sin cambios, como ella ha defendido siempre en público aunque haya explorado sin éxito la posibilidad de introducir pequeñas modificaciones. El 13 de enero, Díaz cenó con Pere Aragonès en Madrid y a partir de ahí las negociaciones se complicaron. El martes, el PSOE dio de manera oficial la consigna de que no se cambia nada. Y ayer Díaz se presentó en Barcelona con el apoyo de la plana mayor de UGT en Cataluña, que tiene vínculos estrechos con ERC.

La ofensiva de Díaz cuenta con el apoyo entregado de los sindicatos, que están vendiendo datos del Gobierno sobre los efectos en el mercado de trabajo español que se esperan de la reforma, entre ellos unas cifras de temporalidad que maneja el Ministerio de Trabajo que situarían a España en ratios parecidas a las de Alemania.

En concreto, el vicesecretario general de Política Sindical de UGT, Mariano Hoya, blandió el martes que la reforma laboral recortará entre 10 y 12 puntos la tasa de temporalidad, actualmente situada en el entorno del 24%. Hoya destacó que el texto pactado tiene "connotaciones históricas", pues es la primera vez que una reforma laboral no recorta derechos a los trabajadores, y pidió a los grupos parlamentarios que la convaliden en el Congreso "sin mover ni una coma".

Una temporalidad del entorno del 12% se situaría por debajo de la propuesta que esgrimía Trabajo en la negociación, reducir la tasa al 15%, y que ocasionó un plante de CEOE en noviembre. El Ministerio maneja informes que no ha hecho públicos sobre los efectos de la reforma en este sentido que ha movido en Bruselas para atraer apoyos.

Poco después de que UGT diera estas cifras, la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, subrayó que es "tan importante" esta norma que se ha preguntado cómo es posible que algún grupo parlamentario pueda decir que no a que algunos trabajadores de subcontratas puedan percibir 12.000 euros anuales más de salario o decir que no a que el 30% de los empleados con contratos temporales pasen a tener uno indefinido. La reforma laboral "está vigente" y sólo contempla el escenario de la convalidación, añadió Rodríguez.

La propia Díaz ha subrayado este miércoles que gracias a la reforma, una persona que trabaje en el sector de transportes de mercancías en Barcelona tendrá una diferencia retributiva por la aplicación salarial del convenio del sector que supone un aumento de 7.700 euros al año, mientras que las camareras de piso percibirán más de 5.500 euros más al año. En suma, ha afirmado que las mejoras van a situarse "en un acordeón que va de entre 3.000 y 12.000 euros más".

En un tono elegíaco, Díaz ha dado por derogada la temporalidad con el fin del contrato por obra y servicio y la anomalía española, la precariedad, y ha augurado que su reforma "se estudiará en las facultades de Derecho". Y ha enfatizado que "se deroga y se hace mucho más que derogar". La vicepresidenta ha aprovechado para anunciar la convocatoria de la mesa de negociación para la subida del SMI, que ha fijado el 7 de febrero, justo cuando espera tener ya la reforma laboral convalidada. "Vamos a seguir incrementando el salario mínimo interprofesional y la reforma laboral supone el incremento de todos salarios del conjunto de la población trabajadora", ha desafiado.

Díaz ha reprochado que haya quien exponga "razones de proyectos políticos" cuando se habla de la reforma laboral, en alusión al portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, pero ha añadido que la relación con ERC es muy buena y que sin duda va a salir adelante la reforma laboral: "Sé además de la sensibilidad social de ERC", ha destacado.

Díaz echó ayer el resto con UGT, muy próxima a ERC. Es el caso de su secretario general, Camil Ros. En los últimos meses, Pepe Álvarez ha visitado a los políticos secesionistas presos y fue quien reclamó el indulto de la consejera de ERC Dolors Bassa, que procede de UGT. Y en septiembre, el secretario general de UGT fichó al militante de ERC y que formó parte del Gobierno de Quim Torra Cesc Poch como jefe de gabinete. Pero también se reunió con CCOO, el sindicato con el que tiene más afinidad.

El trabajo de la patronal

CEOE por su parte, ha escenificado su cercanía a Ciudadanos en un intento de presionar al Gobierno para que convalide el texto sin cambios, en un movimiento que arrincona además al PP. Desde UGT, incluso, se ha puesto en valor el apoyo de la exministra de Empleo del Gobierno de Mariano Rajoy, Fátima Báñez, para que la patronal validara la reforma de Pedro Sánchez.

Y ello a pesar del impacto que la reforma va a tener en la gestión de plantillas y la carga de trabajo que va a suponer, que va a "exigir a las empresas de una planificación adecuada para evitar un aumento importante de costes derivados de la restricción a la contratación temporal", refrenda Juan Pablo Riesgo, socio responsable de EY Insights que fuera secretario de Estado de Empleo del Ministerio de Empleo y Seguridad Social con Fátima Báñez, que cree que "el aumento de costes laborales en forma de cotizaciones a la Seguridad Social, sanciones y costes de extinción de contratos podrá ser considerable”. “El objetivo de reducción de temporalidad es loable, pero puede suponer una carga más a las empresas y una limitación a la flexibilidad en la gestión de sus Recursos Humanos en un contexto complejo de aumento de costes e impuestos y creciente incertidumbre", avisa.

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación
Salir de ver en versión AMP