En España, a 1 de noviembre pasado, la Seguridad Social tuvo que abonar un total de 10.101.961 pensiones a 9.145.589 pensionistas. Son 107.125 pensiones más que a cierre del pasado año y 92.039 pensionistas más. Según los últimos datos publicados por el Ministerio de Inclusión y Seguridad Social, la pensión media del sistema público asciende a 1.198 euros mensuales, pero las diferencias entre las más bajas y las más elevadas pueden alcanzar un 300%. Como en casi todos los ámbitos de la vida política, económica y social de nuestro país, en las pensiones también coexisten dos Españas.
En nuestro país se pagan cinco tipos distintos de pensiones contributivas: de jubilación (la más numerosa, con más de 6,4 millones de nóminas), de viudedad (2,355 millones), de incapacidad permanente (945.141), orfandad (340.491) y en favor de familiares (45.416). La diferencia entre percibir una u otra pensión es notoria. La pensión de jubilación le cuesta como media a la Seguridad Social 1.334 euros mensuales, mientras la de orfandad se queda en 479 euros.
Pero por si estas distinciones no fueran suficientes, conviven también seis regímenes diferentes. El general es el más numeroso, con cerca de 7,5 millones de pensiones, seguido por el de trabajadores autónomos con 1,98 millones. Pero existen regímenes especiales para los trabajadores del mar y para la minería del carbón, además de los accidentes de trabajo y las enfermedades profesionales.
Las diferencias entre percibir una u otra son también importantes. Una pensión de jubilación de un trabajador autónomo está como media en 918 euros, mientras que un pensionista del régimen general recibe mensualmente, como media, 1.534 euros, y un antiguo trabajador de la minería del carbón, 2.687 euros. La diferencia entre la pensión de jubilación más baja y la más alta es de 1.769, un 192%.
Si circunscribimos las comparaciones al ámbito geográfico, se pueden observar enormes diferencias entre la España industrial y la agrícola, entre la España urbana y la España rural, y, cómo no, entre la España poblada y la España vacía. De acuerdo con las cifras del Instituto Nacional de la Seguridad Social, la pensión más baja en un municipio español se paga en la localidad segoviana de Castroserracín, con 505 euros mensuales de media. Acompañan a este municipio, el de Padrones de Bureba (Burgos), con 524 euros, y Miravete de la Sierra, (Teruel), con 544 euros. Solo hay un pueblo más con la pensión media por debajo de los 600 euros mensuales: Las Aldehuelas (Soria), con 574 euros.
¿Qué tienen en común estas cuatro poblaciones? Que todas ellas cuentan en la actualidad con menos de un centenar de habitantes. Pertenecen a provincias que los demógrafos encorsetan en la llamada España que se vacía. Entre los cuatro municipios apenas suman 39 pensiones que la Seguridad Social tiene que satisfacer mensualmente. En Castroserracín, apenas cinco, y ocho en Padrones de Bureba. Hay otros cinco municipios con pensiones entre 600 y 650 euros mensuales, entre las más bajas de España: son Olula de Castro (Almería), Campazas (León), Avión (Orense), Eijas (Cáceres) y Agrón (Granada).
El municipio con la pensión media más alta de España está en Asturias. Es Degaña, localidad en la que alcanza los 1.973 euros mensuales, casi cuatro veces más que la pensión que se paga en Castroserracín. Degaña es un pueblo que ha vivido de la minería hasta el cierre de las explotaciones hace algo más de cinco años.
La segunda mayor pensión se paga en la localidad turolense de Ariño, con 1.760 euros de media. Ariño es otra localidad que ha vivido de las grandes explotaciones mineras de la provincia de Teruel en los momentos más boyantes del carbón. Completa el podio el municipio navarro de Adiós, con 1.788 euros. Hay otras cinco localidades con pensiones mensuales por encima de los 1.700 euros: Vizcaínos (Burgos), Fabero (León), Getxo (Vizcaya), Arguis (Huesca) y Las Rozas (Madrid).
En seis provincias españolas, la pensión media no alcanza los 1.000 euros mensuales. Son Orense, Lugo, Cáceres, Almería, Córdoba y Jaén. Orense es la que tiene la media más baja de España, con 887 euros mensuales, por delante de Lugo (926 euros) y Almería (977). Las más altas se pagan en Álava (1.507 euros), Vizcaya (1.496) y Guipúzcoa (1.456). En Guipúzcoa, por ejmplo, casi ninguna pensión baja de media de los 1.000 euros mensuales. Casi lo mismo sucede en Madrid o en Tarragona o Navarra.
En Vizcaya, la mayor parte de las pensiones sitúan entre 1.300 y 1.400 euros mensuales. En Asturias, una de las provincias mineras por excelencia de España, un tercio de las pensiones están por encima de los 1.500 euros, situación que se repite en Teruel, otra provincia con un gran pasado en la minería del carbón. En Lugo casi ninguna pensión supera los 1.000 euros, los mismos que en Orense, Jaén o Zamora.
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