La legendaria marca de vehículos industriales y agrícolas, que el próximo año cumplirá el 70 aniversario de su fundación en 1954, quiere resurgir de nuevo tras su desaparición en 1987. Y lo hará con un ambicioso proyecto que está llevando a cabo en las antiguas instalaciones de Nissan Barcelona en Zona Franca, donde quiere llegar a proporcionar entre puestos directos e indirectos alrededor de 1.200 empleos.
En su proceso de llevar a buen puerto, el proyecto ha captado 20 millones de euros, mediante una ronda de inversión liderada por Andbank; unos recursos que destinará a financiar la ingeniería de los modelos que fabricará en la Zona Franca y que prevé incrementar con el cierre de otra en 2024. Esta inversión se abonará en dos fases: unos 16 millones de forma inmediata y otros cuatro antes de que finalice el año.
Ebro, un proyecto de las empresas Jaton Racing, Api Brothers, BTech y Nexus Projectes, prevé fabricar en la Zona Franca de Barcelona, en la planta antes en manos de Nissan, un nuevo modelo de furgoneta pick-up eléctrica a partir de 2024 y alcanzar tres años después una producción de 50.000 unidades anuales.
Según ha anunciado la propia empresa, ha formalizado, con esta ronda de inversión, la entrada en el capital de su matriz, EV Motors, "de más de 70 inversores entre institucionales, cualificados y diferentes oficinas de gestión de patrimonios familiares.
La operación "es una muestra más de la atracción que supone este proyecto para los inversores, pero también para las instituciones que creen en la reindustrialización de España en general y, concretamente, en la reactivación de la actividad en la antigua planta de Nissan en la Zona Franca", ha señalado su consejero delegado, Pedro Calef.
Además, Ebro revela que "mantiene negociaciones muy avanzadas para la producción de vehículos" de la china Chery en la Zona Franca. Recientemente, de hecho, la marca Omoda, de este grupo asiático, ha confirmado que baraja instalar una fábrica en Barcelona para impulsar su desembarco en Europa.
Reactivar Zona Franca
Ebro también prevé "iniciar los procesos" para comenzar a cotizar en la bolsa BME Growth en el "corto o medio plazo", "dado el interés que ha despertado el proyecto industrial de la empresa en el mercado".
"El renacimiento de la marca Ebro avanza de esta forma según el plan de negocio diseñado por la compañía y representa un hito en la reindustrialización de España, al relocalizar en nuestro país la producción de vehículos eléctricos, un elemento fundamental en la transición hacia un nuevo modelo de movilidad sostenible y sin emisiones de carbono", reivindica la empresa.
La producción de Ebro debe ser uno de los dos proyectos tractores de la reindustrializada fábrica de Nissan en Barcelona: los terrenos, propiedad del Consorcio de la Zona Franca de Barcelona (CZFB), fueron adjudicados definitivamente en marzo al operador logístico Goodman, en alianza con el 'hub' de electromovilidad liderado por QEV Technologies y Btech.
Calef explicó en su día que la inversión estimada que acometerá Ebro en esta fábrica se sitúa entre los 60 y los 70 millones de euros, y su primer modelo será un Pick-Up 100% eléctrico que puede circular en tracción trasera o con tracción total a través de dos propulsores eléctricos que desarrollan 299 CV y que están alimentados por una batería de 100 kWh que le proporcionan una autonomía de hasta 440 kilómetros.
Un pick-up de grandes dimensiones, con 5,2 metros de largo, 1,85 de ancho y 1,78 de alto, que le permitirán ofrecer un amplio espacio interior para acomodar a cinco personas, así como una plataforma de carga suficientemente capaz para cubrir las necesidades de los trabajos tanto en el campo como en la ciudad.
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