Las ventas de turismos y todoterrenos se espera que rozarán el millón de unidades a finales del presente ejercicio, con un total de casi 973.000 vehículos y un crecimiento del 20%, según Autoscout24 a partir de los datos de MSI, acercándose ya un volumen que se superó por última vez en 2019, el último año “normal” antes de la llegada de la pandemia del covid 19.
Una recuperación que, aun así, supondrá tres años consecutivos por debajo de ese umbral del millón de nuevas matriculaciones que, por población, nivel de motorización y renta per cápita, correspondería a nuestro país. Todo ello en un contexto marcado primero por la pandemia, la crisis de los microchips después y por la inflación.
Un entorno de crisis continuada por diferentes escenarios que aun así no impedirá que los españoles paulatinamente vuelvan al concesionario. Las proyecciones apuntan a un crecimiento del mercado, a pesar del incremento en los precios dentro del contexto general de inflación.
Estas previsiones muestran cómo existe una demanda embalsada de compradores de coches que no se echa atrás ante la subida del precio de los vehículos, por encima ya de los 33.000 euros, casi un 7% más que en 2022, impactados por el mayor coste de fabricación y un equipamiento más avanzado. A ello, hay que añadir la inflación más alta desde mediados de los años ‘80, con una tasa del 5,8% a cierre de 2022.
Lo cierto es que los españoles están tirando de la hucha generada durante la pandemia, cuando la tasa de ahorro creció por encima del 17% en 2020, según el INE. Este “colchón” ya está menguando año a año, un 13,8% en 2021 y un 7,7% en 2022, por lo que los españoles han ido destinando de forma cada vez más masiva su dinero ahorrado en realizar diferentes compras, entre ellas la renovación del coche.
Este crecimiento de las ventas de coches nuevos, tecnológicamente más avanzados (también desde el punto de vista medioambiental), tendrá su reflejo en la caída de las emisiones medias. A finales de 2023, se prevé que los vehículos matriculados emitirán de media unos 117 g/km de CO2, según el ciclo de homologación WLTP, frente a los 120 g/km de 2022 y los 124 g/km de 2021.
Casi dos millones de usados
En cuanto al mercado del vehículo de ocasión, se afianza como la principal opción de los españoles a la hora de renovar su coche, con unas ventas que en este ejercicio 2023 se prevé doblarán a las de nuevos y rozarán los dos millones de unidades.
Y es que las ventas de turismos y todoterrenos de segunda mano crecerán un 3,8% este año hasta los 1,96 millones de unidades, según datos de MSI. De hecho, las ventas de modelos de ocasión durante el primer trimestre del año ya han crecido un 3,3%, con un total de 467.282 unidades, síntoma de que el mercado de usados se está erigiendo en la alternativa de muchos españoles frente al vehículo nuevo.
Un menor precio, unos 4.000 euros más baratos que los modelos nuevos, y sobre todo un prácticamente nulo tiempo de espera en la entrega posicionan mejor al usado que al nuevo frente al consumidor. Porque el plazo medio en la entrega de nuevos modelos puede llegar a alargarse más de seis meses en muchos de los casos.
Un crecimiento este año que, sin embargo, supondrá cuatro ejercicios consecutivos por debajo de la barrera de los dos millones de unidades vendidas, un umbral que sí se superó en 2018 y 2019. Y esto es debido al contexto económico y a un precio en los usados todavía sobredimensionado.
Con respecto a lo primero, la incertidumbre económica existente, marcada principalmente por una inflación aún en niveles muy altos –los precios subirán un 3,6% a finales de 2023, según el Banco de España–, y unas previsiones conservadoras en el crecimiento del PIB –el nivel de riqueza se moderará al 1,6%– continúan alimentando la sensación de crisis en los españoles.
En cuanto a lo segundo, en el caso de los automóviles electrificados, su precio medio es de 34.075 euros, cuando hace seis meses la cuantía era un 4,8% inferior, mientras que en el caso de los de combustión, su precio medio se ha mantenido estable en la franja de los 21.000 euros durante los últimos meses, aunque con una tarifa mayor frente a los 19.000/20.000 euros de hace un año.
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