Las empresas alemanas afincadas en España no han sufrido mucho las consecuencias de la crisis porque se dedican, sobre todo, a la exportación, la parcela de la actividad que mejor ha soportado los envites del ajuste y que ha impulsado el crecimiento cuando la demanda interna no tiraba de la economía. La mayor parte de estas empresas afronta el futuro con optimismo y casi la mitad espera aumentar las inversiones, el empleo y los salarios en 2016.
En concreto y según una encuesta realizada por la Cámara de Comercio alemana para España en colaboración con el International Center for Competitiveness (ICC) del IESE, el 40% de estas empresas espera aumentar el empleo y las inversiones y un 60% acordará subidas salariales de entre el 1 y el 3%. Solo el 10% de estas empresas cuenta con reducir algo su personal.
Están satisfechas con las últimas reformas laborales, pero les preocupa la inestabilidad, la fiscalidad y la evolución de los costes energéticos.
Casi la totalidad, el 90%, asegura estar contenta con el cumplimiento de las expectativas que se había fijado al situarse en España, una cifra que no ha parado de crecer desde el año 2008, pero sin alcanzar los niveles del periodo 1998-2004. A pesar de la satisfacción general, las empresas alemanas se muestran preocupadas por la inestabilidad política y por aspectos más concretos como la formación no académica escolar y profesional en España, la Justicia y la fiscalidad de las empresas.
Así lo señala el director gerente de la Cámara de Comercio Alemana para España, Walter von Plettenberg, que asegura también que empiezan a preocuparse por la evolución de los costes energéticos y que, en cambio, están bastante satisfechas con el marco laboral tras las reformas implementadas por los últimos gobiernos.
A pesar de estos aspectos, las empresas alemanas evalúan de forma mayoritariamente positiva la situación económica general de España. Así, siete de cada diez consideran que la situación es "buena" o "satisfactoria", mientras que tres de cada diez la ven “negativa”. En 2014, cuatro de cada cinco empresas calificaban la situación de “mala” o “muy mala”, a pesar de los que los datos macroeconómicos ya empezaban a ser favorables.
Las inversiones alemanas en España crecen un 85%
Las inversiones alemanas en España subieron un 85%en 2015, situándose en 758 millones de euros. Según la Cámara de Comercio, el contexto económico en España ha variado considerablemente desde el año 2012 y eso se ha reflejado claramente en la evolución de la inversión extranjera directa total. Ya en 2014, según los datos del registro de inversiones extranjeras, los flujos superaron los 19.000 millones, un 14% más.
Además, Alemania ha mantenido una tendencia creciente en el ‘stock’ de inversión en España en los últimos años, a diferencia de Francia, Reino Unido, Estados Unidos e Italia. En concreto, tiene altas cuotas de inversión en sectores como el de la fabricación de vehículos (44,4%), venta y reparación de vehículos (67%) o producción de artículos farmacéuticos (36,9%).
Alemania es el país que cuenta con más filiales en España y el segundo que más empleo genera en el país, solo por detrás de Francia.
Todas las empresas extranjeras afincadas en España realizan una importante aportación al empleo nacional. Así, según los últimos datos del INE, en 2013 operaban en España 10.722 filiales de empresas extranjeras, que daban empleo a 1,14 millones de personas, lo que supone prácticamente el 7% del empleo de ese año. Alemania es el país con más filiales en España, con 1.809, lo que supone casi el 17% del total. Además, la cifra no ha dejado de aumentar desde 2008.
En términos de empleo, Alemania comparte el segundo puesto con Estados Unidos como principales países aportadores, con casi un 14% del 'stock' y unos 155.000 puestos, aunque la cifra llega a 200.000 según el Bundesbank. Por delante de Alemania y Estados Unidos solo está Francia, con el 20,5% del empleo.
A nivel sectorial, el principal destino de los flujos de inversión bruta recibidos de Alemania en los últimos años ha sido la industria de la energía eléctrica, el gas, el vapor y la eólica y el sector de la fabricación de vehículos. También la fabricación de productos farmacéuticos recibe una porción relevante de la inversión.
Los alemanes prefieren Cataluña
Por comunidades, en el año 2014, el último sobre el que se tiene el detalle de los datos, más de la mitad de los flujos de la inversión alemana se han concentrado en Cataluña, seguida, con un 23% de la Comunidad de Madrid. A continuación se sitúan Baleares (13%) y Murcia (8%). El resto de comunidades solo recibieron un 1% de estos flujos.
Según la Cámara de Comercio alemana, esto tiene que ver con el hecho de que la industria de la automoción y la industria química estén más desarrolladas en Cataluña. Si se toman los flujos de inversión bruta acumulados desde 19993, Madrid y Cataluña siguen aglutinando más de dos terceras partes de la inversión alemana en España, aunque en este caso Madrid sería la primera región, con un 55% del total.