¿Puede un juez dictaminar a favor de un accionista de Bankia sin esperar a que se resuelva la macro-causa contra el banco por presunto falseamiento de las cuentas? O, como alegan frecuentemente los abogados de la entidad, ¿no es razonable paralizar las causas civiles, que involucran centenares de miles de euros, hasta que la Audiencia Nacional decida?
Los jueces de Madrid abogan por la primera opción. Decenas de ellos se reunieron el pasado miércoles en la Audiencia Provincial de Madrid para unificar criterios. Y su recomendación, enviada a los tribunales de la región, va en contra de los intereses de Bankia: no aplica el “criterio de prejudicialización”, es decir, no es necesario esperar la resolución de la gran causa penal antes de dictar sentencia en las miles de causas civiles presentadas por particulares.
Y los efectos ya se han empezado a ver. Este lunes la jueza del tribunal de primera instancia número 35 ha denegado la petición de los abogados de Bankia de suspender un proceso civil de accionistas que reclamaban la devolución de su dinero por considerar que la entidad falseó sus cuentas en la salida a Bolsa, como así lo aseguran los peritos del Banco de España en sus informes al juez Fernando Andreu.
Existen 17.672 demandas de nulidad en la compra de acciones registradas contra Bankia, según los últimos datos de la entidad, registrados el pasado mes de julio en la CNMV. El importe total reclamado asciende a algo más de 251 millones de euros.
Hay casi 18.000 demandas, con 251 millones de euros reclamados.
En estos procesos se solicita la anulación de operaciones de adquisición de acciones de Bankia en la Oferta Pública de Subscripción de julio de 2011. Hay 11 demandas de clientes institucionales y 28 demandas acumuladas. Por el momento se han dictado 1.280 sentencias de las cuales 1.220 han sido desfavorables para la Sociedad, todo según Bankia.
La sentencia podría tardar años
La Audiencia Provincial de Madrid ha confirmado a este diario la existencia de esa circular y ha asegurado que se hará pública en unos días.
Fuentes de Bankia lamentan que los jueces estén resolviendo estas demandas civiles pecuniarias antes siquiera de que se decida, en el caso abierto en la Audiencia Nacional, si se falsearon las cuentas. Los abogados que defienden a los accionistas (Cremades, Arriaga o Abogados Preferentes, entre otros), apuntan a que este proceso podría retrasarse muchos años.
Los letrados de la entidad (un pool de los principales despachos madrileños a los que se asignan “lotes” de demandantes) están, por un lado, tratando de frenar los casos hasta la sentencia clave de la Audiencia. Además, están recurriendo las sentencias ya dictadas. Se quejan de la celeridad con la que los jueces de lo civil resuelven a favor de los demandantes.
Aunque la circular no obliga a los jueces a aplicar el criterio de la APM, éstos suelen hacerlo. “Lo que la Audiencia viene a decir es: si usted falla en contra de mi recomendación, y fallaré más tarde en contra de su decisión”, asegura una fuente legal.
El impacto de esta decisión es mayor si cabe porque la gran mayoría de las demandas están concentradas en Madrid. Otras Audiencias Provinciales como Valencia, Coruña, Burgos o Asturias también han tomado decisiones similares en contra de Bankia.
“Ahora ya no hay que esperar cuatro años a que la Audiencia Nacional decida si alguno de los imputados tiene que ir a la cárcel para que los clientes cobren”, asegura Jaime Cocheiro, de Abogados Preferentes, que lleva a 7.000 afectados por acciones de Bankia y asegura tener dos decenas de casos al día. Otros despachos, como Arriaga, tienen un ejército de togas para decenas de miles de clientes.
El juez Andreu fijó en 2015 una fianza de 800 millones de euros a la matriz de Bankia, BFA, y a su antigua cúpula, después rebajada a 34. Hay tres decenas de imputados, entre ellos Rodrigo Rato, Francisco Verdú o José Luis Olivas. Los informes de los peritos del Banco de España concluyeron que Bankia había falseado sus cuentas antes de salir a bolsa. En el folleto incluyó unos beneficios, que más tarde se rectificaron para convertirlos en enormes pérdidas, que terminaron con el rescate de la entidad.