La comisión delegada de asuntos económicos tratará este jueves la transformación del aval concedido por Cesce al proyecto de ampliación del Canal de Panamá, lo que posibilitará que sirva como garantía financiera para la obtención de fondos adicionales que permitan acabar las obras.
El cambio viene motivado por el principio de acuerdo alcanzado la semana pasada por la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) y el consorcio Grupo Unidos por el Canal (GUPC), liderado por Sacyr y adjudicatario del principal contrato de la ampliación, por el que se propone la transformación de las fianzas, de 400 millones de euros, en avales para garantizar préstamos que permitan resolver la tensión de liquidez que ha provocado la paralización de la obra.
La modificación exige que el aval concedido por Cesce en 2009, fecha de la adjudicación del contrato, pase de tener carácter técnico a carácter financiero. Es decir, que pase de cubrir el riesgo de una incidencia grave en los trabajos de ampliación a cubrir la contingencia de un posible impago de los préstamos.
Según una información de la agencia Reuters, el Ejecutivo procederá a aprobar la transformación, dado que es clave para que las negociaciones que sostienen la ACP y GUPC concluyan con éxito.
Si no llegaran a buen puerto y la autoridad canalera tuviera que tomar el control de la ampliación la imagen de España podría quedar gravemente dañada.
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