"Este Trump en el que todos estáis pensando, el presidente de los Estados Unidos, es accionista de Coca-Cola, señores. Pues bien, ese Trump que ha vetado la entrada a los ciudadanos de 7 países musulmanes quiere que la Coca-Cola que se produzca en Europa se produzca en Marruecos, por cierto, país musulmán. País al que van a esquilmar el agua ya de por sí escasa".
Las cámaras grababan el gesto de aprobación de Pablo Iglesias en el coso madrileño de Vistalegre mientras un grupo de mujeres, autodenominadas 'espartanas' tomaban la palabra. El director de la oficina de integración de Coca-Cola European Partners, Víctor Rufart, ha contestado en Twitter: "Cuando la mentira se convierte en argumento", añadiendo el video en el que se hacían estas declaraciones ante los asistentes de Vistalegre.
En este enlace puede verse el video completo.
"Las espartanas de Coca-Cola En Lucha nos hemos convertido, sin proponérnoslo, en el hilo conductor y correa de transmisión de otras luchas. Porque somos un ejemplo de que si luchas puedes vencer. ¡Lucha con las espartanas, boicot a Coca-Cola!", decía una portavoz de las mujeres en el vídeo antes de recibir el caluroso y emocionado abrazo de Pablo Iglesias en el estrado. El nuevo equilibrio de fuerzas en Podemos tras Vistalegre II, donde Irene Montero y Rafa Mayoral ascienden en detrimento de un más moderado Íñigo Errejón, en principio debería fortalecer las alianzas del partido morado con movimientos sindicales contrarios a empresas extranjeras, bien sea la propia Coca-Cola o bien sea Uber, contra quien también se ha manifestado este ala más radical del partido.
Hoy Coca Cola impide que los parlamentarios @MayoralRafa @anamarcelloana puedan reunirse con el comité de empresa pic.twitter.com/aZELj8vFXc
— Tamara Ruiz (@TamaraRPascual) March 18, 2016
A preguntas de este diario, la empresa ha negado que esta versión sea creíble. Víctor Rufart es, según se ha publicado, una de las personas de confianza de Sol Daurella en Madrid, donde se trasladó la sede central de la compañía tras la fusión de las embotelladoras ibéricas. Rufart y Daurella se conocen de la época de Celega, más de 30 años. Con anterioridad, el ejecutivo, de quien se dice que fue uno de los que con más empeño defendió el cierre de la planta de Fuenlabrada, era el director general de Coca-Cola Iberian Partners hasta entonces.
"Errejón es más peligroso que Iglesias"
El directivo catalán puede considerarse tal vez el único ejecutivo español de la empresa que mantiene un tono más beligerante contra Comisiones Obreras y el comité de empresa de Fuenlabrada, una facción muy politizada del sindicato que cuenta como uno de sus mayores éxitos el conseguir reabrir la fábrica de Fuenlabrada en Madrid.
Rufart se salta en ocasiones la estrategia de no responder a los ataques que desde hace ya bastante tiempo viene desarrollando la marca norteamericana. Sin ser escandaloso, aunque sí llamativo, dado que es el único directivo español que lo hace aparte de Marcos de Quinto, que está en Atlanta. Incluso diciendo que "Errejón es más peligroso que Iglesias pero más inteligente" o que una entrevista de la periodista Ana Pastor al propio Iglesias en La Sexta es "muy mala".