El Corte Inglés ha solicitado a la banca acreedora poder emplear parte del dinero que obtenga en la venta de activos en recomprar pagarés adquiridos por empleados y exempleados del grupo. La compañía pretende que los bancos permitan esta dispensa y no hacer una amortización de deuda acelerada, reduciendo la deuda a largo plazo asociada a la emisión de pagarés.
Desde El Corte Inglés se desmintió el jueves esta información. Dos fuentes distintas conocedoras de las negociaciones entre la compañía y la banca acreedora explican que la empresa, además de haber solicitado un crédito de 165 millones para financiar el plan de bajas incentivadas en el que está inmerso, y que afecta a más de 1.000 empleados, ha pedido la dispensa indicada. "Quieren que parte del dinero obtenido en la venta de activos sea para recomprar pagarés, incluso pagarés en manos de empleados ya jubilados", indican las fuentes consultadas. "En principio a los bancos no les suena mal la propuesta, es una manera de abaratar el coste de la deuda", añaden.
El líder de la distribución en España firmó en 2013 un préstamo sindicado de 4.909 millones de euros con 27 entidades lideradas por Santander. La entidad presidida por Ana Botín adquirió ese mismo año, en octubre, el 51% de la división financiera de El Corte Inglés en una operación valorada en 280 millones de euros, división que gestiona los pagarés de los empleados.
El líder de la distribución en España firmó en 2013 un préstamo sindicado de 4.909 millones de euros con 27 entidades lideradas por Santander
Desde entonces el grupo presidido por Dimas Gimeno ha tomado diversas medidas para reducir la deuda, como la venta el pasado año del 10% del capital a Qatar, por 1.000 millones de euros, o la puesta en marcha este año de un plan de venta de activos inmobiliarios liderado por Morgan Stanley. Las fuentes consultadas explican que la banca acreedora, liderada por Santander, había impuesto que el dinero obtenido en la venta de activos fuera directamente a amortizar deuda a corto plazo, pero que valoran ahora la posibilidad de que parte de esos ingresos se destine a la recompra de pagarés en manos de empleados y exempleados.
El Corte Inglés, con una plantilla superior a las 90.000 personas en todas las empresas del grupo, la mayoría a tiempo completo, cuenta con activos inmobiliarios valorados, por la tasadora Tinsa en 2014, en más de 13.000 millones. A finales de 2013, en el marco de la aplicación de medidas para reducir el coste de su deuda, llevó a cabo una emisión de bonos por valor de 600 millones en Irlanda; el pasado mes de enero, a través de Hipercor, captó otros 600 millones en otra emisión privada de bonos también en Irlanda. En diciembre registró un programa de pagarés por 300 millones.
Salida de más de 1.000 personas
CC OO y UGT, miembros del comité de seguimiento del plan de bajas incentivadas que ECI puso en marcha en febrero, que ha contado con el apoyo de Santander, BBVA y Sabadell entre otros, aseguran que por el momento la empresa no está ofreciendo el canjeo de acciones de forma proactiva, pero ofreciendo la posibilidad si el empleado quiere. Los pagarés se renuevan anualmente y la empresa no ha facilitado la información sobre cuánta deuda tiene en manos de sus empleados.
De "recortes profundos" calificó 'Financial Times' la situación actual de El Corte Inglés en un reciente artículo que vinculaba la salud de los grandes almacenes con la economía española. En este artículo se recordaba que la compañía lleva cuatro años sin pagar el impuesto de sociedades, porque las pérdidas le permitían acogerse a bases imponibles negativas. Las devoluciones de Hacienda son así una de las razones clave para haber mantenido a la empresa en beneficios contables.
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