Decía Carlos Gardel que 20 años no son nada, por lo que doce, algo más de la mitad, deben ser muchos menos. Ese es el arco temporal que se ha marcado el Ministerio de Fomento para que el ecosistema pueda acoger los servicios más avanzados ofrecidos por los drones, como el reparto de paquetes a domicilio, los viajes de larga distancia y también pequeños desplazamientos en las ciudades de personas a través de esta clase de aeronaves (taxis aéreos). El plan ha sido desvelado hoy en el Ministerio de Fomento por su máximo responsable, Íñigo de la Serna.
"Este plan estratégico se complementa con el Plan de Innovación para el Transporte y las Infraestructuras se ha desarrollado teniendo en cuenta las distintas iniciativas del grupo Fomento en materia de drones con objeto de que, desde todos los organismos que con guran el Ministerio se impulse de manera coordinada la actividad y se facilite el desarrollo del sector", a asegurado el ministro.
En el desarrollo del plan han formado parte los principales agentes que intervienen en el sector: empresas, universidades, organismos públicos y otros ministerios. Las aportaciones de estos actores han marcado las iniciativas para lograr los principales retos que tendrá que afrontar el sector para desarrollar todo su potencial.
Los servicios que implican un espacio aéreo no restringido, es decir, la total libertad de movimientos por los cielos de las ciudades y la convivencia con el espacio aéreo ocupado por los aviones, no llegarán hasta 2030
Corto y largo plazo
El plan se estructura en dos partes, una inicial en la que se busca una visión de conjunto y los retos y oportunidades del sector del dron, y una segunda en la que se fijan los ejes estratégicos e iniciativas.
Es este último punto el que dará sentido e impulsará los servicios servidos a bordo de este tipo de aeronaves. Fomento se ha fijado la llegada de diferentes servicios en dos horquillas temporales -corto y medio plazo-.
El uso de drones en sectores como la agricultura, el medio ambiente, la minería, la obra civil y la filmación comenzará a estar generalizado antes de la década que viene. Son los denominados como "servicios de baja altura".
De 2020 a 2030 se desarrollarán de forma masiva servicios como el control de las fronteras mediante drones, su uso para la seguridad o en servicios de emergencia y control de instalaciones
Los siguientes diez años, lo que el Plan denomina como el medio plazo, se desarrollarán de forma masiva servicios como el control de las fronteras mediante drones, su uso para la seguridad o en servicios de emergencia y el control de instalaciones. Serán entonces un elemento importante dentro de las ciudades inteligentes.
Los servicios que implican un espacio aéreo no restringido, es decir, la total libertad de movimientos por los cielos de las ciudades y la convivencia con el espacio aéreo ocupado por los aviones, no llegarán hasta dentro de doce años, según las estimaciones de Fomento.
A partir de 2030, según la documentación del Plan, los cielos de las ciudades serán surcados por drones de corta distancia -taxi-dron- y de largo recorrido, así como de aeronaves que llevarán la paquetería y el correo físico de los usuarios de azotea en azotea -Amazon ya estudia este tipo de envíos-.
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