Empresas

Las eléctricas disparan la quema de carbón en plena crisis de la minería

Iberdrola y Gas Natural triplican la producción con esta fuente hasta junio. Además del apoyo al carbón nacional, hay otros dos motivos: el drástico abaratamiento de su cotización internacional y de los derechos de emisión.

El carbón vive un momento dulce como combustible para la generación eléctrica. Entre enero y junio, y a falta de que presente sus resultados semestrales Endesa (la eléctrica que más centrales de carbón tiene en España), el carbón ha disparado su aportación en la cesta de generación de las otras dos grandes del sector, Iberdrola y Gas Natural-Fenosa.

En el caso de Iberdrola, su producción con carbón en España se ha multiplicado por 2,8 veces en el semestre, al situarse en 2.429 gigavatios hora (GWh) hasta junio, frente a los 841 GWh del mismo periodo de 2011. En Gas Natural ha alcanzado los 3.916 GWh, frente a los 1.305 GWh de hace un año.

No en vano, en junio pasado el carbón fue la principal fuente de producción de electricidad, con el 23,7% del total, según datos de Red Eléctrica. En lo que va de año, su peso es del 19,6%. Ha sido la segunda fuente, sólo superada por la nuclear (21,6%).

El carbón es, con permiso del fuel (que ha caído en desuso) el combustible que más emisiones genera: cada kilovatio producido con ese mineral emite casi el triple que uno producido con gas natural, actualmente infrautilizado por el auge de las renovables y el carbón.

Hay una explicación obvia para la quema masiva de carbón: el decreto que, desde finales de febrero del año pasado, y tras varios avatares judiciales e intensas negociaciones con la Comisión Europea, obliga a las eléctricas a utilizar carbón nacional (más caro y de peor calidad que el importado) para tratar de aliviar la crítica situación de la minería. 

Al abaratarse los derechos de emisión, a las empresas les sale más barato contaminar

Pero hay otros motivos. Por un lado, el coste de los derechos de emisión de C02 se ha desplomado un 50,4% respecto a hace un año, lo que propicia que contaminar sea más barato para las empresas. Por otro lado, la cotización internacional del carbón ha sufrido una fuerte caída en los últimos meses porque Estados Unidos, que vive la época dorada del 'shale gas' (yacimientos de gas no convencional), está dando salida a sus excedentes de carbón, lo que ha propiciado un abaratamiento a escala global. Así, el precio medio del carbón API2 (la referencia más habitual para Europa) se ha situado en el primer semestre de este año en 100,3 dólares por tonelada métrica, un 20% menos que en el mismo periodo de 2011.

Y las empresas se han lanzado a importar carbón. Como dijo el pasado martes a los analistas el consejero delegado de Gas Natural, Rafael Villaseca, esta fuente "tiene su cabida en el mix" y la empresa "está aprovechando" la coyuntura de precios internacionales. No obstante, la compañía rechaza la obligación de quemar carbón nacional: "Gas Natural-Fenosa es contraria a esta política; preferiría la libertad absoluta", dijo Villaseca.

El pagano de esta situación es, como casi siempre en estos casos, el consumidor. Con la demanda eléctrica cayendo a plomo, los incentivos al carbón nacional (que, como ha advertido la Comisión Nacional de la Competencia, encarecen el coste de producción de la electricidad y, por ende, la tarifa) han propiciado un aumento del 4,7% en el precio del megavatio hora (MWh) en el mercado spot (al contado) de España, frente a los descensos registrados en otros mercados europeos, como Reino Unido, Alemania y Francia.

El decreto de apoyo al carbón nacional surgió como consecuencia de una promesa del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero en su última intervención en la tradicional fiesta minera de Rodiezmo (León). Esa normativa tiene un coste para el sistema eléctrico de entre 400 y 500 millones de euros anuales, que el ministro de Industria, José Manuel Soria ha sugerido que rebajará, aunque no ha dicho que vaya a eliminarlo. El ministro comparecerá hoy en la Comisión de Industria, Energía y Turismo del Congreso para dar cuenta del espinoso asunto del recorte a las ayudas al carbón nacional, para el que, insiste, no hay margen de maniobra. 

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación
Salir de ver en versión AMP