"¿Cómo es posible que en algunas ocasiones se encuentre un mismo artículo más barato en Amazon que en sus tiendas?", inquirió un periodista al director general de Leroy Merlin en España, Ignacio Sánchez Villares. La respuesta del directivo fue tajante: "Nosotros no vendemos por debajo del margen de beneficio, y además pagamos impuestos en España". Villares criticó, sin citar expresamente al gigante de Seattle, que algunas compañías "estén vendiendo en dumping, con lo cual se puede machacar al pequeño pero no es la solución". Según él, sin embargo, la clave es "el reparto entre el cliente, el fabricante y el distribuidor. Si se lo das todo al cliente en dumping estás perdido".
Es por ello que a Villares le gusta comenzar las presentaciones destacando la contribución tributaria directa e indirecta de su empresa. En 2016 fue de 238,6 millones, 23,7 por Sociedades, 20 por otros impuestos -entre ellos, el de grandes superficies-, 105 por IVA, 69,6 por Seguridad Social y 19,6 millones por IRPF. "Pagábamos un 29% de Sociedades hasta el año pasado, y ahora pagamos un 27%", ha destacado el ejecutivo, reseñando que se puede contribuir fiscalmente y ganar dinero.
"El año pasado dejamos de invertir 100 millones de euros por la parálisis política"
Porque dinero, mucho dinero ha ganado la cadena de bricolaje gala en España: 93,18 millones de euros y un 5% más que en 2015. Y todo ello a pesar de que la parálisis política "paralizó muchos proyectos de expansión, más de los que os pudierais pensar, y además se dejaron de invertir más de 100 millones de euros".
Villares destacó que han bajado precios en 5.640 productos, pero que no todo es jugar a quién vende más barato: "En Estados Unidos Macy's, Wallmart, todas ellas están teniendo problemas ante la nueva realidad. Pero para reventar precios no hace falta estudiar un MBA", ha ironizado.
Datos que nadie aporta
La compañía de bricolaje francesa ha presentado este miércoles sus resultados de 2016 en España, y se ha atrevido a dar cifras que absolutamente nadie en el sector facilita. Por ejemplo, su facturación online: "25 millones de euros", una cifra aún pequeña si se compara con los 1.931 de facturación total, pero engañosa dado que muchas de las compras que finalizan en la tienda física han empezado con una visita a la web o al Facebook de Leroy, que con 3,5 millones de visitas se ha convertido en uno de los principales foros de bricolaje de España.
En cualquier caso, nadie, ni DIA, ni El Corte Inglés, ni IKEA, ni Mercadona, ni Aliexpress, ni por supuesto Amazon que facturaba hasta mayo de 2015 sus ventas en Luxemburgo, aportan datos sobre su negocio a través de la web. Sólo se puede acudir a datos externos de consultoras o contentarse con los datos que aportan las empresas, normalmente parciales y que no permiten hacerse una idea de la auténtica situación de su negocio.
"Los empleados tienen que cobrar en acciones"
Otro aspecto en el que Leroy Merlin parece mostrar una tendencia diferente a la de otras compañías es en la retribución de sus empleados. La empresa asegura mantener un modelo en el que el 93,3% de sus empleados en España (una fuerza laboral de 10.000 personas) son accionistas. "Cuando llegan las negociaciones hay que saber que lo importante no es subir un 1% o un 2% el sueldo, sino dar acciones a la gente. Una empresa no puede estar gobernada por patronal y sindicatos, de forma separada, porque no es el mismo interés el que le pones a una empresa si, por ejemplo, tu plan de pensiones depende de sus buenos resultados que si no. No veo otra opción para el futuro".
Los centros comerciales franceses, perteneciente al grupo ADEO y una de las patas del grupo Mulliez (con otras enseñas de enorme implantación en España como Alcampo, Decathlon, Boulanger o Midas), compiten en un mercado que tiene un valor aproximado en España "de 20.000 millones de euros, aunque teniendo en cuenta que buena parte del mercado es en 'B', habría que quitar por el IVA entre un 30% y un 50%. Por eso el INE estima el mercado español en 12.000 millones", ha dicho Juan Sevillano, director de Desarrollo de la empresa.
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