Bruselas aplicará un severo plan de ajuste para todas las entidades nacionalizadas, salvo Bankia. Los responsables comunitarios europeos, junto a los del FMI y el BCE, pretenden una reducción en el entorno del 40% del tamaño de Novagalicia, Catalunya Caixa y Banco de Valencia con el fin de hacerlos más atractivos para su posterior subasta. La intención de Bruselas es reducir el negocio financiero de estas tres entidades únicamente a su zona geográfica natural, según explican fuentes del sector. El tamaño y la idiosincrasia de Bankia, conformada por siete cajas, le deja fuera de este plan comunitario.
"Todo lo que Bruselas no entienda que pertence al negocio 'core' (principal) de las entidades será puesto en venta", aseguran estas voces. El adelgazamiento de las nacionalizadas afectará a la red, a la plantilla y obligará a acelerar las desinversiones no sólo de los activos financieros dispuestos para la venta, sino también de todas aquellas participaciones que no sean indispensables para el negocio de la entidad. Además, otra parte de la reducción se efectuará mediante el traspaso de los activos tóxicos al banco malo.
Las entidades pretenden rebajar el volumen de adelgazamiento al que aspira Bruselas. Así se lo han trasladado a los responsables comunitarios en las reuniones que mantienen desde hace semanas para lograr la luz verde a sus respectivos planes de recapitalización. Sin embargo, los responsables de la 'troika' no parecen estar por la labor de reducir un ápice su plan inicial. "Tampoco hay que descartar que suceda el efecto contrario, que se eleva el adelgazamiento casi al 50% de los activos", aseguran en fuentes comunitarias.
Bruselas quiere que las nacionalizadas desinviertan en todo lo que no se considere como negocio 'core'
Novagalicia sería la entidad más afectada por esta medida. Reducir su negocio financiero al ámbito gallego castigaría a EVO, el nuevo concepto de banca comercial impulsado por su consejero delegado César González Bueno. Junto a la banca por internet, el ámbito de actuación de EVO se circunscribe a toda la red de las ex cajas gallegas fuera de Galicia, Asturias y León. Además, la limitación que planea Bruselas pone en peligro otra parte importante del negocio de Novagalicia: su bolsa cercana al millón de clientes, antiguos inmigrantes gallegos, desperdigados por Latinoamérica y Europa.
En los últimos días, desde Economía y el Banco de España se reconoce que Bruselas aplicará severos recortes para aprobar los planes de recapitalización no sólo de las entidades nacionalizadas, sino también del resto que reciban ayudas públicas. En estos términos se expresó Fernando Restoy, subgobernador del Banco de España, en su última comparecencia en la subcomisión del FROB. Restoy explicó que se exigirá a cada entidad planes de "adelgazamiento y reducción de capacidad" que sean "exigentes" y proporcionales a la inyección recibida.
El tamaño de Catalunya Caixa y Novagalicia se sitúa en el entorno de los 80.000 millones en activos. Con la reducción que proyecta Bruselas, ambas entidades verían reducido su capacidad a los 50.000 millones. Tras el adelgazamiento, esos 'bancos puente', como los define el Memorando de Entendimiento (MOU, por sus siglas en inglés) serían los que finalmente serían subastados en el primer trimestre de 2013. La banca y Economía pretenden que esas ventas se efectúen de una forma simultánea.
Por contra, el tamaño del Banco de Valencia quedaría en el entorno de los 16.000 millones, tras aplicar la 'medicina' de Bruselas, lo que podría provocar su liquidación ordenada.
Las autoridades comunitarias pretenden que Novagalicia pierda a cerca de un millón de clientes, antiguos emigrantes, diseminados por Latinoamérica y Europa
Mientras, Bankia contará con otra solución diferente al resto de nacionalizadas. Así lo reconoció Restoy en su intervención en la subcomisión del FROB del Congreso. "El planteamiento para BFA-Bankia tiene que ser distinto que para otras entidades. Es una entidad que, por su carácter sistémico, tiene que seguir funcionando y, por tanto, una eventual liquidación o resolución debe ser contemplada a un horizonte mucho más de largo plazo, después de un proceso suficientemente ordenado y dilatado de reestructuración, adelgazamiento, saneamiento, etcétera. Es decir, más en la línea de una entidad en reestructuración que de una entidad en resolución", aclara Restoy.
La entidad presidida por José Ignacio Goirigolzarri, que cuenta con un tamaño de 320.000 millones en activos, espera tener aprobado su plan de reestructuración y recapitalización el próximo noviembre.
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación