Jornada importante para el futuro de la ‘operación Chamartín’. La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, mantiene este miércoles su primer encuentro con Antonio Béjar, presidente de Distrito Castellana Norte (DCN), la sociedad encargada de llevar a cabo el desarrollo urbanístico que pretende unir los tres distritos del norte de la capital. La reunión se antoja de calado, toda vez que el proyecto, que cuenta con una inversión prevista de 6.000 millones de euros, ha despertado muchas reticencias en Ahora Madrid, la formación que ha pasado a gobernar la ciudad tras las elecciones del pasado 24 de mayo.
El encuentro será una primera toma de contacto que permitirá a la nueva alcaldesa conocer de primera mano los detalles de la operación y al presidente de DCN, las primeras impresiones de Carmena sobre el desarrollo, cuyo futuro se ha puesto en duda desde el triunfo electoral de Ahora Madrid.
El encuentro será una primera toma de contacto que permitirá a la nueva alcaldesa conocer de primera mano los detalles de la operación
Sin embargo, como informó Vozpópuli, Carmena manifestó al resto de los grupos que componen el nuevo Consistorio (PP, PSOE y Ciudadanos) que su intención no es rechazar de plano la ‘operación Chamartín’ aunque, eso sí, quiere conocerla en profundidad y tratar de introducir modificaciones para que resulte más acorde con el modelo de ciudad que propone.
Después de que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid tumbara el desarrollo en el verano del pasado 2013, las tres Administraciones, junto a las empresas públicas Renfe, Adif y Canal de Isabel II, todas ellas involucradas en la operación, trabajaron junto a la adjudicataria del proyecto en un nuevo concepto que superar los obstáculos jurídicos con los que se había topado el anterior planteamiento.
Sin embargo, la tramitación del nuevo Plan Parcial de Reforma que permitirá la operación, que incluye la construcción de más de 17.000 viviendas, se quedó a medio camino, toda vez que sólo dio tiempo a aprobarlo de manera provisional, a la espera del análisis de las numerosísimas alegaciones presentadas.
El trámite pendiente del Ayuntamiento
El trámite que resta es la aprobación definitiva por parte del pleno del Ayuntamiento de Madrid de dicho plan, cuestión que ha quedado paralizada, por el momento, a la espera de que el nuevo equipo de Gobierno analice en profundidad la situación. Esta primera cumbre se produce apenas once días después de que Carmena tomara posesión como alcaldesa de Madrid con el apoyo del PSOE, cuyo cabeza de lista, Antonio Miguel Carmona, también fue muy crítico con el nuevo proyecto, aunque su partido, junto al PP, ha sido su principal valedor a lo largo de los más de 20 años que lleva planteada la operación Chamartín.
Tras ser nombrada candidata de Ahora Madrid para el Ayuntamiento, Carmena mantuvo una reunión con la por entonces alcaldesa, Ana Botella, en la que le solicitó que no aprobara la reforma que daría luz verde definitiva al proyecto. En su programa electoral, la formación no hacía alusión explícita a la operación Chamartín pero sí se manifestaba en contra de un determinado tipo de proyectos urbanísticos de grandes dimensiones en los que se podría enmarcar.
El papel de los técnicos
De ahí la importancia de la reunión que, en otros casos, sería un simple formalismo, toda vez que tendrán que ser los técnicos, tanto del Ayuntamiento como de DCN, los que traten en profundidad la manera de llevar a cabo la operación y determinar si los intereses son compatibles.
DCN está participada por BBVA (72,5%) y Grupo San José. La sociedad modificará formalmente su denominación en la junta de accionistas que se celebrará la semana que viene ya que, hasta ahora, su nombre era Desarrollo Urbanístico Chamartín (DUCH). A este asamblea, su presidente ya podrá llevar las primeras impresiones sobre cuán despejado está el futuro para la operación.
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