Continuando con su senda ahorradora, Renfe Operadora ha decidido revisar ahora la eficacia de sus Salas Club, un espacio de relax situado en las principales estaciones españolas que permiten el acceso a los clientes que viajan en clase Preferente. La empresa estatal pretende clausurar algunas de estas salas, especialmente las de aquellas terminales a las que no llega la alta velocidad, cuyo coste resulta difícil de asumir. Renfe prevé perder 200 millones en el ejercicio de 2013, según ha reconocido su presidente, Julio Gómez-Pomar, por culpa de la nueva política comercial basada en descuentos agresivos del billete del AVE.
Ya hay casos de Salas Club clausuradas: la de Murcia Del Carmen, en la capital murciana. Así lo ha sabido este medio a través de viajeros que han intentado acceder y no han podido. La pasada primavera este espacio VIP echó el candado provisionalmente, pero por obras, así que reabrió semanas más tarde. El nuevo cierre no ha sido anunciado por nadie, ni tampoco ha informado de él la prensa regional. Según fuentes de Renfe, la clausura responde pura y llanamente a la crisis, aunque los trabajadores, pertenecientes a la sociedad V2, se encuentran realizando labores relacionadas con Atención al Cliente en la estación de Murcia.
Las mismas fuentes hablan de una “revisión general” de las Salas Club, incluidas algunas poco rentables que se encuentran en estaciones de AVE. No sucederá con las principales terminales del país, véase Chamartín y Atocha (Madrid), Sants (Barcelona), Joaquín Sorolla (Valencia)… El pasado mes de septiembre se inauguró la Sala Club de Alicante, instalada en el interior de un tren antiguo. Se expanden en ciertas localidades y se suprimen en otras.
Servicio desconocido para clientes
Según Renfe, que no ha confirmado ni desmentido estos datos, “es verdad que los clientes no siempre sacan partido de estos espacios, la mayoría de las veces porque los desconocen”. Portavoces autorizados de la empresa aseguran que no se producirá un “desmantelamiento masivo” de Salas Club “porque el precio del billete incluye, en parte, ese servicio”. Lo que sí piensa hacer la operadora ferroviaria es publicitar más las salas para uso y disfrute de los viajeros.
El cierre programado de salas VIP es un nuevo paso hacia el ahorro en Renfe. Recientemente, se suprimió la bandeja de comida en clase Preferente excepto en el AVE, a condición de abaratar un poco más el billete. También han quitado los trenes hotel que unían Madrid y Barcelona con París, que suponían un gasto excesivo tanto para Renfe como para el operador francés SNCF.
