Repsol logró un beneficio neto de 1.235 millones de euros en los primeros seis meses de 2021, frente a las pérdidas de 2.484 millones del mismo periodo del año anterior, gracias al inicio de la recuperación de la demanda de crudo, que sigue por debajo de los niveles de 2019, y a la mejora de los precios de las materias primas. Además, este resultado mejora en un 9% el obtenido en el primer semestre de 2019, el ejercicio previo a la pandemia, cuando obtuvo unas ganancias de 1.133 millones.
Según ha informado este jueves la petrolera a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el resultado neto ajustado CCS, descontada la variación en el valor de las existencias y extraordinarios, fue de 959 millones, cinco veces más que en 2020, mientras que el resultado bruto de explotación, ebitda, fue de 3.635 millones, lo que supone multiplicar por seis el del primer semestre.
La compañía que preside Antonio Brufau obtuvo en el semestre un flujo de caja positivo en todos los segmentos y logró reducir su deuda neta un 6%, hasta situarla en 6.386 millones. El flujo de caja operativo positivo de Repsol ascendió a un total de 1.932 millones, más del doble que en 2020, y el flujo de caja libre, también positivo en todos sus segmentos, totalizó 955 millones.
Áreas de negocio
El área de Exploración y Producción alcanzó un resultado neto ajustado de 678 millones entre enero y junio de 2021, frente a las pérdidas de 51 millones registradas en el mismo periodo del ejercicio anterior. El resultado también fue superior en un 4,9% a los 646 millones de euros del primer semestre de 2019.
Según Repsol, la optimización de las operaciones y la reducción de costes permitieron sacar el mayor partido posible de la subida de los precios medios de los hidrocarburos respecto al mismo periodo de 2020, que fue de un 62% en el caso del barril de petróleo Brent y de un 56% en el del gas Henry Hub. La producción media en los primeros seis meses del año ascendió a 599.300 barriles equivalentes de petróleo al día.
De su lado, el área Industrial obtuvo un resultado neto ajustado de 239 millones de euros, con una caída del 19,3%. Este negocio se está viendo afectado por la pandemia y la transición energética, que va a exigir importantes proyectos e inversiones en los próximos años para alcanzar sus objetivos de transformación y descarbonización. Así, el grupo llevó a cabo en el semestre paradas en sus complejos industriales para adecuar sus operaciones en un entorno de bajos márgenes, que lastraron el negocio de refino. No obstante, en esta área sobresalió el comportamiento del negocio de Química.
Mientras, el área de Comercial y Renovables logró un resultado de 228 millones, un 40% más, y dentro de este negocio, el de Movilidad mejoró sus cifras notablemente tras las restricciones y el confinamiento vividos en España en 2020.
Aumentan las ventas en las gasolineras
En el segundo trimestre de 2021, las ventas en estaciones de servicio en España mejoraron un 53% en comparación con las del mismo periodo de 2020, en el que se confinó a la población y hubo fuertes restricciones a la movilidad. Además, entre abril y junio el negocio de Aviación también tuvo un comportamiento más positivo por similares motivos, mientras que Renovables y Generación Baja en Carbono continuó aumentando su aportación al grupo.
Inversiones
La compañía invirtió en los primeros seis meses del año 1.061 millones, un 4,7% menos que en el mismo periodo del ejercicio anterior. La mayoría de las inversiones las acaparó el área de Comercial y Renovables, con un crecimiento del 59,5%, hasta alcanzar los 413 millones.
El consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, ha dicho que las medidas que ha implantado la compañía le están permitiendo capturar el máximo valor posible, aprovechando de inmediato los indicios de recuperación, con señales que la acercan a niveles previos a la pandemia.
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