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El presidente de Seat 'planta' al IESE tras nuevas informaciones del fraude CO2

Las nuevas irregularidades detectadas en la certificación de emisiones del Grupo Volkswagen que podrían afectar al grupo Seat han obligado al actual presidente de Seat a suspender su presencia en el XXX Encuentro de la Automoción para atender a reuniones "en el más alto nivel".

El nuevo presidente de Seat, Luca de Meo, ha cancelado su presencia en el XXX Encuentro de la Automoción que se celebra en la escuela de negocios IESE de Barcelona para poder atender a reuniones "al más alto nivel", tras las nuevas irregularidades detectadas en la certificación de emisiones del Grupo Volkswagen que podrían afectar a modelos de la marca española, según han asegurado fuentes de la compañía. 

El presidente de la asociación de fabricantes de vehículos, Anfac, José Luis López-Schümmer, ha comunicado la ausencia de Luca de Meo a los participantes en el encuentro en la inauguración del evento, en presencia del consejero de Empresa y Empleo, Felip Puig. Según ha dicho López-Schümmer, Luca de Meo se ha disculpado por no poder dar la conferencia prevista sobre la evolución de Seat "debido a las últimas informaciones", que le obligan a "atender reuniones en el más alto nivel".

De momento se desconocen cuántas unidades ni qué modelos de Seat estarían afectados por las nuevas irregularidades detectadas

Se desconoce los módelos afectados

De momento se desconocen cuántas unidades ni qué modelos de Seat estarían afectados por las nuevas irregularidades detectadas, que se han extendido a los coches propulsados con gasolina aunque mayoritariamente hacen referencia al diésel.

El escándalo de las manipulaciones en motores diésel del fabricante alemán Volkswagen, grupo al que pertenece Seat, se extendió más aún, al informar la propia compañía de que se han detectado también "irregularidades" en la certificación de emisiones de CO2, que afectan a alrededor de 800.000 vehículos del grupo.

Según informó VW en un comunicado, en el marco de las investigaciones en torno a los motores diésel por las acusaciones de las autoridades medioambientales estadounidenses -que se centraban en las emisiones de óxido de nitrógeno (NOx)-, se han detectado qué modelos presentaron datos irregulares de emisiones de CO2.

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