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Muere el presidente de Total al chocar su avión con una quitanieves cuyo conductor estaba borracho

Christophe de Margerie, de 63 años, era el máximo dirigente del cuarto grupo privado petrolero y gasista del mundo. El aparato en el que debía viajar desde Moscú a París colisionó con una máquina quitanieves en el mismo aeropuerto, antes de despegar. Otros tres tripulantes también han fallecido.

El presidente de la petrolera francesa Total, Christophe de Margerie (63 años), ha muerto al estrellarse su avión, un Dassault Falcon 50, pasada la medianoche en el aeropuerto moscovita de Vnúkovo tras colisionar con una máquina quitanieves cuando se disponía a despegar con destino a París. Los otros tres tripulantes del aparato también han fallecido. El conductor de la quitanieves implicada en el accidente estaba borracho, según el Comité de Instrucción de Rusia.

Inicialmente se informó de que el conductor de la quitanieves también había muerto, pero más tarde la oficina de prensa del aeropuerto comunicó que éste había resultado ileso en el accidente.

La portavoz de Vnúkovo, Elena Krilova, declaró a la prensa local que el Falcon 50 no llegó a despegar y se incendió tras colisionar con la quitanieves, que se hallaba en medio de la pista.

Tras conocerse que el el conductor de la quitanieves "se hallaba en estado de ebriedad", según explicó el portavoz del CI, Vladímir Markin, el ministro ruso de Transporte no quiso hacer declaraciones. "Prefiero abstenerme de hacer comentarios", dijo Maxim Sokolov, al ser preguntado sobre las causas del accidente.

Poco antes de que Markin informara de que el conductor de la quitanieves estaba bebido, el Comité Instrucción había señalado que las líneas investigación se centraban en un posible error humano, ya sea de los pilotos, del conductor de la quitanieves o de los controladores de vuelo.

Meteórico ascenso 

De Margerie, presidente director general de la multinacional francesa Total, el cuarto grupo privado petrolero y gasista del mundo, ocupó diversos puestos hasta que en 1995 fue nombrado director general de la petrolera para Oriente Medio, puesto en el que se curtió en la diplomacia económica. En 2002 ascendió a director de exploración y producción del grupo, y en 2007 a director general. Continuó su ascenso en la empresa más rica de Francia hasta llegar a la cima de la firma en 2010 para relevar a Thierry Desmarest, su mentor y actual presidente de honor del cuarto grupo privado de petróleo y gasista del mundo, con cerca de 100.000 empleados y una facturación de 189.542 millones de euros (242.480 millones de dólares).

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