La entidad catalana Unnim, adquirida recientemente por el BBVA, ha cerrado 2011 con unas pérdidas de 469 millones de euros debido a las dotaciones realizadas para sanear el activo inmobiliario y por el coste de reestructuración derivado de la fusión de las cajas de Sabadell, Terrassa y Manlleu. En concreto, Unnim ha destinado 518 millones de euros al saneamiento de su cartera crediticia e inmobiliaria, mientras que el impacto del coste de reestructuración de la entidad tras la integración de las tres cajas ha conllevado unos gastos extraordinarios de 92 millones de euros.
Según ha informado Unnim a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la evolución de los resultados se ha visto también condicionada por la crisis económica general y la fuerte competencia que se ha producido en la retribución de los depósitos de ahorro. Todo ello ha lastrado los márgenes de Unnim: el de intereses ha caído en 2011 un 34,4%, hasta 178,6 millones de euros, mientras que el básico se ha situado en 262,3 millones, casi un 32% menos, y el bruto ha disminuido otro 23,1%, hasta 322,3 millones.
Otro de los datos negativos en la cuenta de resultados de Unnim es su elevada tasa de morosidad, que se sitúa en el 9,83%, muy por encima del ejercicio anterior, en que era del 5,87%. Por su parte, el crédito a la clientela del grupo se ha situado en 16.774 millones, un 7,4% menos, como consecuencia de la baja actividad económica y especialmente de la caída del sector inmobiliario.
Resultado bruto de 44 millones
La entidad financiera subraya, no obstante, que su resultado bruto consolidado antes de dotaciones y costes extraordinarios ha sido de 44 millones de euros, un 56% menos. Respecto a la actividad de negocio, Unnim ha cerrado 2011 con un activo total de 29.288 millones, un 3,7% más sobre el agregado de los activos de 2010 de las tres cajas fusionadas.
Por lo que respecta a los gastos de explotación, ha habido una disminución interanual del 10,8%, fruto, sobre todo, de la política de contención de costes y de los menores gastos por la reducción de plantilla y por la integración de oficinas, lo que ha supuesto unos ahorros de alrededor de 25 millones de euros durante el ejercicio 2011.
La entidad cuenta con un volumen total de depósitos administrados de 24.523 millones de euros (-7,6%) y presenta una liquidez de 2.296 millones al cierre del ejercicio, lo que equivale al 8% del balance. "Estos activos líquidos, junto con los activos cotizados del grupo, permiten a Unnim hacer frente a los vencimientos de emisiones mayoristas hasta más allá de finales del año 2013", asegura la entidad, que el BBVA se adjudicó el pasado mes de marzo por un euro en una subasta en la que también optaban a hacerse con la caja catalana bancos como Ibercaja, el Popular y el Santander.
La operación se ha realizado en condiciones muy ventajosas para el BBVA, que no tendrá que devolver al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) los 953 millones de euros que ha invertido en la recapitalización de Unnim, dado que esta cifra será cubierta por el sector a través del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD). Adicionalmente, este organismo -que se nutre con las aportaciones de la banca- también concederá al BBVA un esquema de protección de activos que le cubrirá del 80 por ciento de las pérdidas derivadas de su cartera durante un plazo de diez años.
Unnim ha finalizado en 2011 el proceso de fusión de las cajas de Sabadell, Terrassa y Manlleu y ha llevado a cabo un importante proceso de reestructuración que ha supuesto, desde el inicio de la integración, el cierre de 159 oficinas y la reducción de la plantilla en 575 trabajadores, en su mayoría tras la aplicación de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) acordado con los sindicatos. A 31 de diciembre, la plantilla de Unnim era de 3.155 empleados y contaba con una red de 577 oficinas, la mayoría de ellas -535- situadas en Cataluña y el resto en Madrid, Valencia, Zaragoza y Sevilla.
Este proceso de integración, explica Unnim, se completará en las próximas semanas con la total integración informática de las plataformas tecnológicas de las cajas fusionadas. Finalizada esta operación, Unnim iniciará otro proceso de integración, en este caso con su nuevo propietario, el BBVA.
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