El coronavirus ha marcado las presentaciones de resultados del primer trimestre de 2020 de las grandes energéticas del Ibex 35. Un sector que no es el que más ha sufrido, pero que ha notado un impacto en sus principales clientes durante el mes de marzo. Sus cuentas han estado llenas de partidas excepcionales, provisiones y beneficios 'no recurrentes'. El dato incuestionable es que su facturación se ha desplomado en 3.700 millones de euros frente al mismo período de 2019, un 10% menos.
La compañía que más ha sufrido en sus ingresos entre enero y marzo ha sido Naturgy. La caída en los precios del gas, una menor demanda de energía, el recorte en ingresos regulados en España y la depreciación en monedas latinoamericanas han lastrado un 20% la facturación de la empresa que preside Francisco Reynés. En concreto, la compañía ha cedido en 1.282 millones frente a los ingresos del mismo período de 2019.
Por su parte, el recorte de la facturación de Iberdrola se ha recortado un 7% hasta marzo, 713 millones menos hasta cerrar con 9.425 millones el trimestre. La compañía ha sufrido menores ingresos regulados en la distribución en España tras el recorte aprobado para el periodo 2020-25 y la depreciación del real brasileño. "Dada la exposición de Iberdrola a las redes europeas y la generación renovable, vemos un impacto limitado por la caída de la demanda tras la introducción de las medidas covid-19", defienden los analistas de Credit Suisse sobre la energética.
Endesa ha cerrado esta primera etapa del año con unos ingresos prácticamente similares a los del trimestre de 2019. Su caída es sólo del 0,3% y cierra marzo con una facturación de 5.069 millones de euros, 16 millones menos que en 2019. "Endesa es una de las pocas compañías que podrán mostrar crecimiento en beneficios y en dividendos en 2020. Los objetivos del Plan Estratégico 2022 son realistas y alcanzables", afirman la analistas de mercado de Bankinter, Aránzazu Bueno.
Caída de Repsol
Repsol es, junto a Naturgy, la energética del Ibex que más ha sufrido este trimestre del coronavirus en sus ventas. La petrolera ha retrocedido en sus ventas un 13% frente a los tres primeros meses de 2019, lo que supone 1.577 millones menos que le han llevado a un total de 10.477 millones de euros de facturación. "La compañía ha superado situaciones muy complicadas en el pasado (2008 YPF, 2015 precio crudo y Talismán) y hoy la situación de balance y liquidez es de las mejores del sector", detallan los expertos del mercado de Renta 4.
El castigo para Enagás ha sido del 8%. El negocio regulado de transporte de gas está aislado del contexto actual de tortuosa y rápida contracción de la actividad. "El actual entorno de bajos precios del petróleo no le beneficia, ya que afecta la capacidad de pago de sus clientes a futuro", asegura la analista de Bankinter. En total, Enagás ha perdido 26 millones de ingresos en este período hasta un total 283 millones de facturación.
Acciona ya entra en este grupo, aunque su negocio no sea exclusivamente energético. La división de renovables seguirá impulsando el crecimiento del grupo. Acciona está acelerando sus inversiones en la división para hacerse fuerte en el sector aunque, de momento, también sufre un retroceso de los ingresos del 5% hasta los 1.622 millones.
Red Eléctrica ha sido la única del sector que no ha sufrido un castigo en sus ingresos. La empresa de infraestructuras de la red ha aumentado un 0,2% su facturación, hasta los 500 millones. Pero no se puede confiar. "Antes de que la CNMC apruebe las circulares definitivas, los proyectos requieren el informe preceptivo del Consejo de Estado. De confirmarse esta propuesta, los resultados del grupo se verían afectados, sobre todo a partir del año 2024", describe la analista Aránzazu Bueno
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