España es la economía de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que más lejos está de volver a su menor tasa de paro, registrada en mayo de 2007, cuando se situaba en el 7,5%. Con la crisis financiera, el desempleo en España creció hasta alcanzar un nivel récord de casi el 27% en 2013, tal y como recoge la serie del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Desde entonces -y con la excepción de la pandemia, que hizo crecer de nuevo el paro hasta el 16% en los peores meses- mantiene una senda descendente. No obstante, la recuperación está siendo lenta: en octubre de este año, y pese a la creación de empleo récord del último año, todavía se situaba en el 12,5%, según los datos difundidos por la OCDE.
De hecho, nuestro país lleva más de un año liderando la OCDE en tasa de paro, donde la media estaba en octubre en el 4,9%. Sigue incluso por encima de Grecia (11,6%), que durante años ha sido el país de la UE con más desempleo y, pese a esto, está más cerca de su tasa más baja, registrada en mayo de 2008, según los datos de la OCDE.
España superó la tasa del país heleno en el verano de 2021 y desde entonces ocupa el primer lugar. En el tercer puesto se sitúan Costa Rica (11,5%), Colombia (10,9%) y Turquía (10,1%). En el lado opuesto, con las tasas más bajas de desempleo, están República Checa (1,7%), Japón (2,2%), Corea del Sur (2,5%) y Alemania (2,9%).
La tasa de paro se enquista
Aunque la tasa de paro anual de España siga mejorando, no se espera que vuelva a los niveles previos a la crisis financiera en el medio plazo. En sus últimas previsiones para el periodo 2022-2025 publicadas en noviembre, la OCDE no contempla que baje del 12,5% en todo el horizonte. Tampoco la Comisión Europea proyecta una tasa de paro inferior en los próximos años.
"Las debilidades del mercado laboral siguen siendo motivo de preocupación, a pesar de las notables mejoras. La tasa de desempleo se redujo sustancialmente durante la última década, pero sigue estando entre las más altas de la UE, con un 14,8% en 2021, especialmente entre los segmentos de jóvenes y trabajadores a largo plazo. Se pronostica que disminuirá en 2022, pero permanecerá prácticamente sin cambios después", alertó Bruselas el pasado mes de noviembre.
La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), en su informe sobre el Programa de Estabilidad del Gobierno para el periodo 2022-2025 publicado en mayo, cuestionó la 'promesa' del Gobierno de acabar 2025 con una tasa de paro del 9,6%. De hecho, en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2023, el Gobierno contempla un descenso de la tasa de paro del 12,8% al 12,2%, mientras que la AIReF la deja inmóvil en el 12,8%.
Además, en el informe para inversores publicado este mes de diciembre, el Gobierno reconoce por primera vez que España destruirá empleo el próximo año en términos de puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo de la Contabilidad Nacional. Proyecta una caída del empleo del 0,2%, frente al aumento del 0,6% que incluyó en los PGE de 2023.
En el informe publicado por el Tesoro también se empeora ligeramente la tasa de paro respecto a la proyectada en los Presupuestos (pasa del 12,2% al 12,3%) pero aun así desciende respecto a 2022 (12,8%). Es decir, que contempla una caída del empleo y de la tasa de paro a la vez, confirmando que los indicadores en términos de personas (afiliación y paro registrado) están teniendo un mejor comportamiento que los indicadores en horas.
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación