Desde abril el número de empresas inscritas en la Seguridad Social está en caída libre. Tras un mayo y un junio con saldo negativo, en el mes de julio también se perdió tejido productivo. El número de empresas inscritas en la Seguridad Social se situó en 1.325.910, unas 12.700 menos que tres meses antes, según las estadísticas del Ministerio de Trabajo.
Sólo en julio desaparecieron 5.600 empresas, que se suman a las 7.200 que se habían perdido en los dos meses previos. Las causas son la destrucción de tejido productivo más intensa en la educación o la agricultura, la desaparición atípica en estas fechas de empresas en sectores como la industria, y el menor crecimiento en otras actividades.
En la misma línea, el mercado laboral sigue dando muestras de ralentización. La Seguridad Social sumó 21.945 ocupados de media en julio, por debajo de las cifras habituales para este mes. Este descenso evidencia que el mercado laboral sigue resistiendo, pero crece con menos fuerza. El paro se redujo en 10.968 personas, mínimo desde 2008.
Precisamente, el resultado del empleo en julio estuvo influido por la destrucción de afiliación en la agricultura, (38.008 menos) y en la construcción (2.335 menos). El sector educativo perdió 110.705 ocupados con el fin de curso. Por su parte, la industria se mantuvo en niveles positivos (16.900 afiliados más) pese al frenazo que se está produciendo en la actividad, tal y como refleja el índice de gerentes de compra (PMI).
Menos empresas que en 2019
La mala evolución de los últimos meses ha reabierto la brecha con el nivel prepandemia. En julio de 2019 España tenía 1.328.629 empresas inscritas en la Seguridad Social, 2.700 más que ahora. De esta forma, la situación vuelve a estar peor que en el año previo a la covid, después de que en abril se consiguiera recuperar el nivel de aquel año.
Sin embargo, también es cierto que julio era un mes 'negativo' en cuanto al registro de empresas antes de la pandemia. En 2019 se perdieron 20.700 empresas respecto a junio y en 2018, 16.850. Eso ha hecho que, al ser más moderada la pérdida este año, la brecha se haya estrechado respecto a junio. En junio había 17.900 empresas menos que en el mismo mes de 2019.
En todo caso, en los meses de julio de 2020 y 2021, con la recuperación del tejido productivo perdido en los peores meses de la pandemia, el número de empresas inscritas en la Seguridad Social creció respecto a junio, no cayó. Ya en 2022 se mantuvo relativamente estable, mientras que este año ha regresado a su tendencia precovid.
Por tamaño de empresa, la mayor pérdida se localiza en aquellas con entre uno y dos trabajadores, con 9.200 inscritas menos que en abril. También han desaparecido 4.300 compañías con entre 3 y 5 trabajadores. También se ha perdido tejido productivo entre las medianas (-156) y las grandes empresas (-98). Por contra, han aumentado las micropymes (entre 6 y 9 trabajadores), con 627 más; y las pequeñas (de 10 a 49 trabajadores), con 449 más.
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