Economía

El Estado recauda gracias a la inflación el triple de lo que gasta en ayudas

Hacienda refleja que los ingresos por impuestos entre enero y julio subieron en 22.000 millones respecto a 2021, mientras que el gasto en ayudas para hacer frente a la inflación suma cerca de 7.000 millones

La recaudación tributaria del Estado ha crecido en más de 22.000 millones entre enero y julio respecto al mismo periodo de 2021 gracias a la inflación. Sin embargo, el coste de las principales medidas adoptadas por el Gobierno hasta julio, entre las que destacan las rebajas fiscales de la luz y la bonificación de los carburantes, ronda los 7.000 millones, según los datos publicados este lunes por el Ministerio de Hacienda. Es decir, que los ingresos por impuestos triplican el gasto en las ayudas concedidas desde que arrancó la guerra en Ucrania.

Por un lado, la Agencia Tributaria (AEAT) cifra en 146.235 millones los ingresos tributarios hasta julio, 22.283 millones más que un año antes, con un crecimiento del 18%. En términos homogéneos (netos de devoluciones), la variación anual asciende a 22.586 millones (un 17,5% más).

El Ejecutivo explica este aumento por "el crecimiento de los ingresos por IVA consecuencia de la mejora del consumo y de las subidas de precios; el aumento de los ingresos del IRPF, fundamentalmente por las retenciones del trabajo y vinculado a la creación de empleo y a los incrementos en salarios y pensiones medias y en el tipo efectivo; y las menores devoluciones realizadas a comienzos de año en el Impuesto sobre Sociedades".

En particular, la recaudación a través del IVA ha crecido en 7.934 millones entre enero y julio respecto al mismo periodo de 2021, la aportación del IRPF se ha elevado en 10.259 millones, y el Impuesto sobre Sociedades ha aportado 2.469 millones más que un año antes, según el último informe mensual de la Agencia Tributaria.

7.000 millones en ayudas

Por otra parte, la AEAT también cifra el coste que han tenido para las arcas públicas las medidas fiscales, es decir, la pérdida de ingresos que han supuesto las rebajas de impuestos vinculados a la electricidad. Según sus cálculos, hasta julio el coste de estas medidas fue de 4.268 millones; aunque si se contabiliza el impacto desde que se pusieron en marcha en el verano de 2021, la pérdida total de ingresos asciende a 5.873 millones.

De los 4.268 millones que han costado estas medidas fiscales sólo en lo que va de 2022, 930 millones corresponden a la rebaja del tipo del IVA en electricidad (RDL 12/2021); 1.163 millones, a la rebaja del tipo del Impuesto Especial sobre la Electricidad (RDL 17/2021); y 2.175 millones, a la supresión Impuesto Valor Energía Eléctrica (RDL 17/2021).

Además, la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE), gestor de la contabilidad pública también dependiente del Ministerio de Hacienda, cuantifica en 2.766 millones el gasto en otras ayudas y bonificaciones contempladas en el RDL 6/2022.

En esa cifra el Ministerio de Hacienda incluye la bonificación de 15 céntimos que asume el Estado en el precio de los carburantes, con un coste hasta julio de 2.059 millones; otros 422 millones de ayudas al sector del transporte; 60 millones de ayudas a las empresas intensivas en consumo de gas; y 255 millones a la CNMC para compensar la reducción de ingresos en el sistema eléctrico como consecuencia de la reducción de peajes para consumidores electrointensivos.

En total, el coste de todas estas medidas hasta julio ha sido de 7.034 millones. Esta cifra coincide con la que proporcionó el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el 25 de junio en la presentación de su segundo plan anticrisis tras la invasión de Ucrania. Entonces cuantificó que entre los dos decretos se habrá invertido a final de año cerca de 15.000 millones, de los que 6.000 millones correspondían al primero y 9.000 millones al segundo.

En el segundo decreto se prorrogaron las principales medidas activas hasta ahora, como el descuento a los carburantes, y se incluyeron algunas nuevas, entre las que destacan el cheque de 200 euros para familias con ingresos inferiores a 14.000 euros al año y la subida temporal del 15% a los perceptores del Ingreso Mínimo Vital y a las pensiones no contributivas. La IGAE todavía no ha cuantificado el coste de estas medidas en su informe.

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