Europa ha sido el primer destino que ha elegido el presidente chino, Xi Jinping, para viajar de forma oficial en 2019, un movimiento estratégico que no parece casual en pleno enfrentamiento con EEUU por las tensiones proteccionistas y cuando Europa tiene un pie ya metido en una desaceleración que tiene mucho que ver con la ralentización de la economía china.
A invitación del presidente francés, Emmanuel Macron, y de sus homólogos de Italia y el Principado de Mónaco, Xi está de gira por Europa para estrechar lazos económicos, sobre todo vendiendo las oportunidades de inversión que existen en el gigante asiático dentro del proyecto bautizado como "las nuevas rutas de la seda", es decir, ingentes inversiones en infraestructuras y telecomunicaciones para unir Asia y Europa.
Los presidentes europeos no pueden desaprovechar la oportunidad para afianzar sus relaciones económicas con China, un país imprescindible para sus exportaciones: si China se desacelera y deja de comprarle a Europa, las exportaciones del viejo continente se resienten, caen los pedidos y las fábricas se paran, como ha empezado a ocurrir en febrero.
Europa, y sobre todo Alemania, necesita que China le compre, una de las razones que podría justificar el viaje que hará este martes la canciller alemana, Angela Merkel, a París para encontrarse con Xi, Macron y el presidente de la Comisión Europea, Jean Claude-Juncker, en una cita que no estaba incluida inicialmente en la agenda oficial y fue anunciada por el Elíseo el jueves, según adelantó AFP.
El comercio y el clima son los dos grandes temas que abordarán los mandatarios, para los que la vulneración continua de derechos humanos que se produce en China -así como el robo de propiedad intelectual, entre otros problemas- no es una línea roja que impida estrechar lazos comerciales con la segunda potencia económica del mundo.
Segundo destino de nuestras exportaciones
El Ministerio de Comercio chino anunció el viernes en su página web la imposición de medidas 'antidumping' (aranceles de entre el 18,1 y el 103,1% para compensar la venta de productos por debajo de precio de mercado) a productos de acero importados de la Unión Europea, Japón, Corea del Sur e Indonesia.
Este organismo explica que debido a esas prácticas su industria local ha sufrido daños sustanciales por lo que se ve obligado a aplicar esas medidas, en vigor desde este sábado.
China es el segundo país al que más exportó la Unión Europea en enero, según los últimos datos divulgados por el ICEX, con un volumen de ventas por valor de 17,33 millones de euros en el primer mes del año (un 7,8% del total de las exportaciones), mientras que ese país asiático fue el primero del que la UE importó productos (por un valor de 38,88 millones de euros, el 14,9% del total de las importaciones).
Los diez grupos de productos que más exporta la UE son aviones y aeronaves, vehículos, procesadores, medicamentos, barras y alambres, aceites crudos de petróleo, cajas de cambio de vehículos, cuadros, paneles y consolas, partes y accesorios de la carrocería y preparaciones para la alimentación infantil.
Durante el mes de enero de 2019, las mayores caídas en las exportaciones fueron en el sector automóvil: coches (-20%), cajas de cambio (-22,6%), partes y accesorios de la carrocería (-16,2%) y cuadros, paneles y consolas (-4,3%).
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación