España exportó en 2018 mercancías por valor de 285.024 millones de euros, lo que supone un incremento del 2,9% respecto al año anterior pero un frenazo respecto al crecimiento del 8% que habían mostrado en 2017, debido principalmente a la caída de las exportaciones del sector automóvil.
Según explicó la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, en rueda de prensa, en 2018 se produjo "una desaceleración en el crecimiento de las exportaciones, aunque mantuvieron una dinámica de crecimiento acusado".
España incrementó especialmente la venta al exterior de productos energéticos (+15,1%), manufacturas no químicas (+6%) y productos químicos (+5,1%), pero sufrió una caída del -1,5% en sus ventas de coches al exterior.
Las razones principales fueron el "crecimiento escaso o nulo de Alemania", las menores compras por parte del Reino Unido debido a la incertidumbre en torno al 'brexit' y la caída de ventas a Turquía, "un país golpeado por la inestabilidad política".
Por destino de nuestras ventas al exterior, un 65% del total de las exportaciones se destinaron a la Unión Europea (lo que supone una subida del 2,6%), y destacaron especialmente las ventas a Francia y Portugal.
La subida de las exportaciones a países de fuera de la UE fue todavía superior (+3,3%), con un aumento en todas las zonas excepto en Oceanía y Oriente Medio. Subieron especialmente las exportaciones a África (+5%) y a América del Norte (+3,7%). Por países, subieron especialmente las ventas a Singapur, Egipto y Argelia, más de un 20%.
El déficit comercial subió a 34.000 millones por la subida de precio del petróleo
En 2018, las importaciones subieron a más ritmo que las exportaciones, un 5,6% respecto a 2017, hasta el volumen total de 318.864 millones de euros, lo que provocó un aumento del 36,8% en el déficit de la balanza comercial española.
De esos casi 34.000 millones de déficit, más de 25.000 corresponden a déficit energético, debido a la subida del precio del petróleo que se vivió en los primeros nueve meses del año, aunque la bajada del último trimestre arroja expectativas "positivas" para este año, precisó la secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez.
Los riesgos para 2019
De cara a futuro, la ministra advirtió que el contexto general es de incertidumbre y existen amenazas como el resurgimiento de medidas proteccionistas y medidas restrictivas al comercio procedentes de China y también de dentro de la Unión Europea por el 'brexit'.
También influirán negativamente factores como la desaceleración en mercados emergentes "que en los próximos meses será mayor de la prevista", la ralentización del crecimiento en China, que podría repercutir a su vez en Alemania, "un socio comercial importante para España", y el endurecimiento de la política monetaria que hasta ahora funcionaba como "viento de cola".
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