Alberto Nuñez Feijóo ha enseñado todas sus cartas energéticas para ganar las elecciones del 23 de julio. Y va más allá de extender la vida útil de las centrales nucleares. El Partido Popular plantea, entre otras cosas, crear un impuesto en la tramitación de las plantas renovables para poder desatascar el actual atasco que existe en estos trámites.
El PP lo ha denominado “tasa por hito” e irá con cargo al promotor del proyecto. El objetivo es que financie el incremento de los medios necesarios para que la Administración agilice la gestión de los expedientes, evitando el colapso burocrático. Asimismo, Feijóo y su equipo quieren dividir la geografía española en función de las mayores o menores necesidades de trabajo administrativo para declarar si un proyecto renovable es viable o no.
Un asunto que, según comentan desde el sector a Vozpópuli, le han insistido al equipo de Nuñez Feijóo en sus diferentes reuniones estos meses. En la actualidad, en todo el territorio nacional hay proyectos renovables que suman 43 gigavatios (GW) de potencia, el 80% fotovoltaica y el 20% eólica. Necesitaban una autorización de construcción antes del 25 de julio, si no se verían abocados a iniciar toda la tramitación administrativa, tras obtener nuevamente los permisos de acceso y conexión a la red.
Una crisis en el sector provocó un ‘indulto’ por parte del equipo de Ribera. La pasada semana, el Gobierno extendió seis meses el plazo para que esos proyectos obtengan la autorización de construcción. Es decir, en seis meses, con posibilidades de que exista un Gobierno liderado por Feijóo, el problema burocrático con las renovables se volverá a repetir y esta “tasa por hito” es un intento de evitarlo.
Un nuevo bono social
El plan del Partido Popular también pretende cambiar los métodos aplicados por Teresa Ribera para proteger a los consumidores de energía más vulnerables. Su propuesta es “mejorar” los actuales bonos eléctrico y térmico y será compatible con cualquier tipo de contrato de electricidad y gas con Bono Social Único (BSU).
“Obligaremos a las comercializadoras a estandarizar una amplia oferta de productos en el mercado libre (con precio estable, discriminación horaria, cuotas fijas, cuotas planas) para todos los clientes en baja tensión”, expone el programa que ha presentado este martes el equipo de Alberto Nuñez Feijóo.
También quieren retirar el mecanismo ibérico y el resto de medidas de intervención del mercado mayorista de la electricidad. “España tiene que estar en el centro del debate energético de la UE y no en la política energética que nos ha aislado regulatoriamente de las propuestas por la UE, provocando inseguridad regulatoria y restando atractivo a nuestro país como receptor de inversiones en el sector energético”, recoge el plan del PP.
Feijóo insiste en más nucleares
Como adelantaba este medio, el Partido Popular quiere extender la vida útil de los siete reactores nucleares operativos en España si les da “el visto bueno el Consejo de Seguridad Nuclear”. Otra de sus apuestas energéticas, que ya se recoge en el PNIEC del actual Gobierno, es fomentar el almacenamiento de energía renovable mediante un mecanismo de capacidad y condiciones flexibles de acceso y conexión.
Otra de sus medidas, que también ha sido reclamada por las grandes empresas de hidrocarburos de este país, es impulsar el biogás, el biometano, los eco combustibles y la biomasa para una gestión más sostenible de los residuos. También mantienen el discurso de potenciar el hidrógeno renovable para fomentar “la reindustrialización española”.
Por último, quieren negociar con Francia y el resto de la Comisión Europea para dejar de ser una “isla energética”. Su idea es potenciar las interconexiones energéticas bajo criterios técnicos y económicos que “aseguren un reparto proporcional del coste de las mismas en base a los beneficios a cada sistema eléctrico interconectado”.
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