La nueva amenaza de recesión debería afrontarse con menos ideología y más realismo. Es el consejo que ha lanzado este lunes a Pedro Sánchez el aspirante popular a derrocarlo, Alberto Núñez Feijóo. En presencia de un auditorio plagado de empresarios, el presidente del PP ha criticado con dureza la inclinación del líder socialista por "imponer la ideología a la realidad". Una praxis que, a su juicio, tiene y tendrá repercusiones negativas sobre la recuperación económica; y, sobre todo, provocará un "divorcio entre los políticos y la sociedad".
El presidente del PP ha participado este lunes en el XXV Congreso Anual del Instituto de Empresa Familiar (IEF). El político gallego ha vuelto a exponer las principales propuestas que defiende en su carrera para conquistar La Moncloa. En este sentido, ha defendido una bajada de impuestos que permita a todos los españoles beneficiarse del espectacular incremento de la recaudación que está experimentando Hacienda gracias a la inflación. "Lo que ha hecho el Gobierno no es una reforma fiscal, sino una subida de impuestos de 3.000 millones de euros" ha denunciado.
El líder popular puso como ejemplo de buena gobernanza a Portugal y a su primer ministro, António Costas. "Él si es socialdemócrata; Sánchez, no", ironizó. En esta línea, Feijóo recordó que el Ejecutivo portugués cuenta con una política fiscal más laxa y una regulación más sencilla para impulsar actividades industriales. Además, "Portugal no tiene impuesto de patrimonio ni de donaciones".
Por ello, criticó las últimas decisiones de Sánchez en materia fiscal, que invitan a los empresarios y a las grandes fortunas a llevar su dinero fuera de nuestro país. "La política es una combinación de ideología y de realidad. Los modelos ideológicos hay que trasplantarlos a la realidad. El problema es cuando esa ideología se convierte en prioritaria, ahí vienen los problemas", advirtió. "O la ideología y la realidad casan, o hay un divorcio entre los políticos y la sociedad".
Feijóo se mostró especialmente crítico con los niveles de deuda que está atesorando el Estado. "Dicen que la deuda es progresista. Pero yo creo que lo más conservador es vivir a costa de tus hijos", protestó, en referencia a la herencia que el Gobierno está dejando a las futuras generaciones, por no ser más eficientes con el gasto y mostrarse incapaz de taponar de una vez el agujero de la Seguridad Social.
Ha vuelto a criticar el peligroso giro protagonizado por el Gobierno en el Sáhara, cuyas consecuencias aún sigue pagando España. Se refería de este modo al enfrentamiento diplomático con Argelia, que ha propiciado un descenso de las ventas comerciales con el país y -lo peor- demasiada incertidumbre sobre los contratos pendientes de firma de grandes compañías españolas como Naturgy.
Pronóstico económico
Feijóo recordado que España es la cuarta economía de la Eurozona pero está a la cola de la recuperación de los niveles previos a la pandemia. El presidente del PP restó fuerza al optimismo del Gobierno sobre el descenso de las inflación en septiembre. "Los precios siguen estando muy altos, una inflación del 9% no es un buen dato". En este sentido, recordó que un IPC tan elevado está haciendo mella en el poder adquisitivo de los hogares y en los márgenes de las empresas.
"Para nosotros, la situación de la economía española es de pronóstico reservado", ha concluido el líder popular. No obstante, ha asegurado que contar con dos partidos como PP y PSOE sigue siendo "un activo para España". "Es evidente que hemos sido castigados, porque hemos gobernado durante 40 años. Es lógico, se han tomado decisiones difíciles como la entrada en el euro o la incorporación a la OTAN, a lo que se suman varias crisis".
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