En Santander Asset Management España lo tienen claro: el próximo año va a suponer la prueba de fuego para que los inversores calibren hasta qué punto ha sido acertada su entrada en fondos de inversión, incrementando en cierta medida su exposición al riesgo.
Si durante el último año y medio los ahorradores han ido modificando su perfil para ajustarse a la nueva realidad macroecónomica, de tipos casi planos y escasa remuneración en los activos sin riesgo, los que ahora ya pueden calificarse como 'inversores' estarán muy pendientes de cuál es la rentabilidad que consiguen los fondos donde han invertido. Y para alcanzar un rendimiento adecuado va a hacer falta más que nunca mucho asset allocation y diversificación. “2015 va a ser el año de la gestión activa”, aseguró Ana Rivero, directora de Producto de Santander Asset Management España durante una presentación de perspectivas de la gestora.
“Han entrado muchos inversores en fondos que van a estar vigilando los datos de rentabilidad. Y si se consiguen, el mercado lo premiará”, señaló Rivero, quien no cree que se trate de un tema de rebajar comisiones para incrementar ese posible recorrido al alza de la remuneración. “Se trata de cumplir lo que indica el folleto de inversión del fondo y que los inversores perciban el valor de la gestión”, subrayó.
La entrada de inversores en fondos mixtos de renta fija y su retirada paulatina de los fondos garantizados, en un contexto de “volatilidad en los mercados pero no en la economía real”, según Rivero, va a poner a prueba la capacidad de las gestoras, en un momento en el que será “muy complicado estructurar un fondo con objetivo de rentabilidad porque exigen plazos de cinco años para obtener solamente menos de un 1%”. Así que los fondos multiactivo, los que ofrecen un dividendo periódico y los mixtos seguirán siendo el centro de atención de las firmas.
Esta volatilidad que menciona la responsable de producto de Santander AM España tiene que ver con un mundo que va a convivir con una probable subida de tipos en Estados Unidos a mediados del próximo año, lo que permitirá calibrar la recuperación de la economía norteamericana sin los estímulos de la Reserva Federal, con una zona del euro en la que ya no caben distinciones entre países core y países periféricos, sino más bien entre aquellos que han implementados reformas y los que todavía no lo han hecho de manera satisfactoria.
Y en esta divergencia, “la percepción de riesgo va a ser mucho mayor”, pese a que los datos macro confirman que el crecimiento económico se va a mantener, aunque por debajo de su potencial. “En 2015 se dejarán notar todavía los efectos de la crisis”, apuntó Rivero. De hecho, la gestora española trabaja con un escenario de crecimiento del PIB para la zona del euro del 1,3%, lastrado aún por la situación de Francia e Italia, donde no terminan de llevarse a cabo las reformas estructurales que necesitan sus economías. Y España, que ya las ha hecho, juega con ventaja, al tener una previsión de crecimiento diferencial del 1,8%.
Rivero considera cantos de sirena a quienes advierten de una posible entrada en deflación de Europa porque el FMI la cifra únicamente en un 30% de probabilidad para Europa y, sobre todo, porque Mario Draghi, el presidente del Banco Central Europeo, “está empeñado en que no sea así”. Las medidas anunciadas por el organismo supervisor más la esperada compra de deuda pública significan que “los activos no cotizan en un escenario de deflación” en estos momentos.
Respecto a Estados Unidos, la subida de tipos anunciada para mediados del próximo año, aunque no hay quien descarta que se aplacen hasta 2016 o más adelante, no debe ser interpretada, a juicio de Rivero, como un síntoma de inflación, sino más bien como la corrección de una anormalidad que se produce desde hace ya seis años.
Esta diferencia de políticas monetarias de los bancos centrales presionará una apreciación del dólar respecto al euro, aunque la Reserva Federal norteamericana emitirá señales para controlar su moneda, que desde Santander AM España sitúan en una cotización de entre 1,20 y 1,15.
La necesidad de que el crédito fluya en Europa será fundamental para estimar si el crecimiento es sólido porque, en un escenario donde el BCE dispone de hasta un trillón de euros para inyectar liquidez en el sistema financiero, gracias en parte a la devolución de los préstamos que las entidades han realizado, si no se reactiva puede dar una señal de que las empresas no encuentran incentivos suficientes para endeudarse a largo plazo con inversiones fuertes.
Con este escenario, de tipos planos en Europa durante un período prolongado de tiempo, donde el diferencial de la deuda española con la alemana seguirá ajustándose hasta los 75 puntos básicos, según las previsiones de la gestora para el próximo año, con la posibilidad de que la curva alemana de tipos de interés permanezca en zona negativa al menos hasta 2016, la única forma de obtener rentabilidad en renta fija pública será alargando las duraciones de los bonos, lo que incrementará la sensación de volatilidad. Pero en Santander AM España apuestan claramente por la deuda española y la renta fija con grado de inversión, ya que consideran que el mercado de high yiedl ya está muy sobrecomprado.
Respecto a la renta variable, en la gestora de la entidad cántabra creen que la bolsa española tiene mayor potencial que la europea, aunque se decantan por ésta antes que la de EEUU, donde estiman que ya está muy comprada por los inversores la idea la recuperación. En mercados emergentes, la idea estrella es México, donde se encuentran posicionados de manera muy positiva.
“Lo mejor es diversificar, en función del perfil de riesgo y el horizonte temporal de cada ahorrador. Pero van a tener que subir un escalón en lo que consideran que significa ser conservador”, enfatizó Rivero.