El Shakgate es solo un asunto más para el empresario Gerard Piqué. Mientras las redes estallan con la canción que le ha dedicado su exmujer, el exfutbolista se ha hecho tiempo también para romper un multimillonario contrato con la Federación Internacional de Tenis (ITF) por la organización de la Copa Davis. El torneo de naciones más importante en el mundo de la raqueta era el proyecto estrella con el que Piqué saltó a la industria del entretenimiento.
Kosmos, la empresa que encabeza el exdefensor blaugrana, ha rescindido el contrato que le unía con la ITF durante 25 años al no haberse cumplido las expectativas de negocio con las que se hizo con los derechos en 2019. Entonces, aceptó pagar a la ITF un canon anual incluso superior a los 40 millones.
En 2021 y 2022, la compañía que dirige Piqué consiguió que la Federación de Tenis rebaje el canon hasta los 10 y 20 millones respectivamente apelando a la situación sobrevenida de la pandemia. Sin embargo, para este 2023, la ITF reclamaba al menos 32 millones, 36 millones de cara a 2024 y, a partir de 2025, un fijo de 40 millones más el alza de la inflación, según ha podido saber Vozpópuli.
900 millones solo en canon
En total, Kosmos sumaba pagos potenciales de alrededor de 900 millones de euros solo en concepto de canon. Una coyuntura que, a tenor de los niveles de facturación registrados en las primeras tres ediciones, volvían el proyecto inviable para la empresa de Piqué, que primero apostó por Madrid como única sede para luego llevar el torneo a un formato con múltiples sedes y ciudades por Europa.
Con todo, de acuerdo a informantes del mercado, Kosmos no fue capaz de rentabilizar el proyecto hasta este 2023 pese a una inversión superior a los 100 millones de euros. Y ello pese al evidente relanzamiento del torneo en términos de marca y patrocinadores.
La ruptura del contrato con la ITF avanzada por 2Playbook es "definitiva" según las fuentes consultadas. En ella está trabajando el equipo legal de la compañía que Piqué fundó con el apoyo de inversores de la talla del presidente de Rakuten, el japonés Hiroshi Mikitani, o el americano Larry Elisson, el mayor socio de Elon Musk en la propiedad de Twitter.
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación