El Gobierno ha despertado al fin. Representantes de los ministerios de Fomento y Empleo han accedido a participar en la negociación que están llevando a cabo la patronal y los sindicatos de la estiba, justo 24 horas antes de la votación para convalidar el Real Decreto Ley que reformará el sector y para la que el Ejecutivo no cuenta con apoyos suficientes. De no salir adelante, el Estado se expone a una fuerte e histórica multa de Bruselas.
La intención del Gobierno es poner encima de la mesa de negociación las propuestas que en los últimos días han transmitido a través de los medios de comunicación. Una oferta que pasa por la garantía del empleo al 100% para los estibadores y también por ayudas económicas para facilitar la transición hacia la liberalización del sistema, como exige la Comisión Europea.
El Ejecutivo pretende que las partes puedan alcanzar este miércoles un acuerdo, toda vez que sin él no será posible convalidar el Decreto. Aunque Ciudadanos ha visto con buenos ojos la intención del Gobierno y está dispuesto a votar el jueves a favor del Decreto si participan en la mesa de negociación, el PSOE no dará su apoyo si no hay un acuerdo firme.
La reacción del Gobierno se produce después de que tanto la patronal como los sindicatos solicitaran su participación en las negociaciones. En el caso de los representantes de los trabajadores, esta postura se mantuvo desde el primer momento. La patronal también se sumó a la iniciativa al comprobar que las negociaciones no avanzaban por el hecho de que las propuestas del Gobierno no entraban en la negociación.
Los estibadores no se fían
A la espera de lo que suceda en la reunión de esta tarde, Coordinadora Estatal de Trabajadores del Mar, el sindicato mayoritario de la estiba, ha manifestado su estupor por la tardía reacción del Ejecutivo, que ha atribuido a una actitud de "postureo".
En el caso de que el Decreto no llegue a convalidarse antes del próximo día 24 de marzo y, por lo tanto, se derogue, el Estado se enfrenta a una sanción por parte de la Comisión Europea superior a los 22 millones de euros, a los que se añadirá una cantidad de 134.000 euros diarios hasta que se apruebe la reforma de la estiba.
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