El impuesto a energéticas será permanente pero con incentivos a la inversión para evitar fugas de empresas. Así lo ha anunciado este martes la vicepresidenta cuarta y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, preguntada por cuáles son exactamente los planes del Gobierno después de que Pedro Sánchez confirmara un "rediseño" tras las amenazas de Repsol, Iberdrola y Endesa de llevarse inversiones fuera de España.
"El diseño del impuesto era temporal", ha dicho Montero en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, pero en el acuerdo de investidura [con Sumar] se dice que se hará permanente", ha explicado, por lo que seguirá, y ha aclarado que "básicamente se darán incentivos a la inversión para la electrificación en red". Se quiere "mandar un mensaje al sector energético con el fin de que continúen o empiecen inversiones y para acelerar el ritmo".
Esto no afectará al impuesto a la banca ya que desde el Fisco apuntan a que no existe una necesidad similar de que el sector invierta.
Fuentes de Hacienda han explicado que en el rediseño del impuesto a energéticas no se prevé reducir la cuota ni calcar el impuesto europeo, que grava beneficios y no márgenes. Sin embargo, las mismas fuentes han admitido que algunas empresas han trasladado que no tienen beneficios.
Así, desde el Fisco han apuntado a que se incluirán incentivos a la inversión, en lo que cabe deducir que se seguirá la línea de algunas enmiendas del PNV y PDeCAT que recogían propuestas empresariales que no se incluyeron.
Amenazas de las empresas
El Ministerio ha venido a admitir que este viraje se debe a la presión de las empresas, que se reúnen habitualmente con Moncloa y el Ministerio de Transición Ecológica, ha dicho.
Cabe recordar que Repsol y Endesa han advertido que, de continuar el impuesto a las energéticas, podrían sacar importantes inversiones fuera del país. Precisamente Ignacio Sánchez Galán anunciaba el 4 de diciembre que Iberdrola amplía su alianza con Abu Dhabi para invertir 15.000 millones en renovables en Alemania, Reino Unido y EEUU.
Desde el sector se esperaba sin embargo tras el anuncio de Sánchez que el impuesto siguiera vigente en 2024 gravando los márgenes de 2023 y luego decayera como estaba previsto antes del pacto con Sumar.
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