Los clientes de la gestora inmobiliaria Haya Real Estate, controlada por el fondo estadounidense Cerberus y vinculada a la Sareb, están en pie de guerra contra la compañía desde hace unas cuantas semanas. Entre otros motivos, porque vecinos de distintos municipios de Valencia han denunciado que han recibido en varias ocasiones cartas de impago falsas.
Fuentes de Sareb confirman a Vozpópuli que sí se han llegado a enviar esas cartas de impago, pero no es por una cuestión de acoso, como inicialmente argumentaban los clientes, sino por un problema de gestión. “Lamentamos profundamente la lentitud que se ha podido llevar a cabo en los procesos y lamentamos que se haya interpretado como acoso, cuando no tiene nada que ver”, explican.
“En estos momentos, estamos en coordinación y pleno entendimiento con la propia Generalitat para regularizar la situación cuanto antes”, argumentan. Según las informaciones publicadas en enero por el diario valenciano Levante, y como se puede leer en varias denuncias públicas realizadas a través de las redes sociales, los vecinos acusan a la gestora de “acoso inmobiliario”, porque “presionan a los inquilinos para que se vayan”.
Las fuentes consultadas argumentan que nada tiene que ver con acoso y que se trata de una cuestión mucho más “amplia”, ya que “hay que comprobar muchas cosas, como la actualización de los pagos; y es un proceso muy lento”. A lo largo de la conversación, remarcan en varias ocasiones que sienten el daño y la confusión que han ocasionado por una cuestión “de lentitud que hayan podido tener desde Haya”. De hecho, señalan que ante todo, la intención de Haya es llegar a una solución cuanto antes para regularizar la situación y que todos los vecinos puedan permanecer en sus hogares.
Otras denuncias
La gestora inmobiliaria ha recibido otras quejas en los últimos meses por malos servicios. Ya sea por una cuestión económica o por una errónea gestión, la cuestión es que en las redes sociales y en páginas especializadas en el sector, la tendencia general de la opinión de los clientes es que el servicio ofrecido deja mucho que desear.
Una de las críticas más repetidas es que no atienden a las denuncias de los usuarios. Una de las clientas con las que nos hemos puesto en contacto, denuncia que lleva más de un mes sin agua caliente en pleno invierno. “No solucionan nada. ¿Qué más se puede hacer?”. Y no es la única. Otra clienta se queja de que ella estuvo dos meses sin luz y tuvo que estar “conectada ilegalmente”. Muchos otros esgrimen que solicitan ver casas y no lo consiguen o que solicitan arreglos y no llegan a nada. La respuesta de las fuentes consultadas ante las quejas recibidas es que se tramitan poco a poco y "según la urgencia y la necesidad".
Situación económica de la empresa
Durante el mes de marzo de 2020, en lo peor de la pandemia, Haya Real Estate tuvo que realizar un ERE a 205 trabajadores, un 30% menos que los 292 anunciados al inicio de las negociaciones. Según se informó entonces, la solución prometía indemnizaciones de 31 días por año con un tope de 23 mensualidades. Adicionalmente, habrá indemnizaciones de entre 4.500 y 13.000 euros dependiendo de la antigüedad.
Sin embargo, durante los nueve primeros meses del año 2021, Haya Real Estate obtuvo unas pérdidas de 6,3 millones de euros. Pese a ello, supone una disminución del 67% respecto a los 'números rojos' de 19 millones de euros que registró en el mismo periodo del año anterior. Esta mejora en el resultado neto responde a la buena evolución de la actividad, que reportó unos ingresos de 141,1 millones de euros hasta septiembre, tras crecer un 11%.
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación