La Guardia Civil acusa a Iberdrola de dejar sin agua e ingresos a la región de Ricobayo, en Zamora, al secar su embalse. Según el cuerpo, hay indicios contra la eléctrica de un presunto delito contra el medio ambiente para maximizar sus beneficios.
Se trata de un nuevo frente judicial para la compañía que preside Ignacio Sánchez Galán en el que la Guardia Civil ha concluido que la maniobra de la multinacional provocó problemas de abastecimiento a varias poblaciones, según 'El Confidencial'.
En concreto, según las pesquisas, la energética habría reducido las reservas del pantano del 98% al 11% para maximizar sus beneficios.
Además de problemas de abastecimiento de agua, la actuación de la compañía ocasionó graves pérdidas económicas en instalaciones turísticas y agrícolas de la comarca de la España vaciada.
Por este caso, Iberdrola se expone a consecuencias de carácter penal. La magistrada encargada de estos hechos imputó a la eléctrica el 13 de diciembre por un presunto delito contra los recursos naturales y el medio ambiente.
Iberdrola, citada a declarar
Entonces, ordenó nuevas diligencias para depurar otras posibles responsabilidades, como una manipulación del coste de la energía.
El próximo 16 de febrero, como recoge el digital, están citados a declarar tanto el representante legal de la empresa como el representante jurídico de la Confederación Hidrográfica del Duero.
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