El Producto Interior Bruto (PIB) creció un 5,5% en el conjunto del 2022, tal y como ha confirmado este viernes el Instituto Nacional de Estadística (INE) tras el avance realizado en enero. En cuanto a la evolución más inmediata de la economía, los últimos datos trimestrales reflejan un crecimiento muy moderado, del 0,2%, en la última parte de 2022.
No obstante, la mayor parte del crecimiento se generó un año antes y el PIB habría subido un 3,6% en el conjunto del 2022 aunque la actividad hubiese registrado crecimientos cero todos los trimestres; es decir, aunque se hubiese quedado todo el año igual que estaba a cierre de 2021. Esto se debe al efecto arrastre del año anterior, que fue de menos a más por la expansión económica del periodo postcovid.
La economía creció un 0% en el primer trimestre, un 2,2% en el segundo y un 0,2% en el tercero en términos ajustados de estacionalidad y calendario, lastrado por el menor impulso del consumo de las familias y la inversión empresarial. Igualmente, en el cuarto trimestre registró el mismo crecimiento, del 0,2%.
Este crecimiento en la última parte del año estuvo impulsado fundamentalmente por la caída de las importaciones en un 4,2% (mayor que la de las exportaciones) y el repunte del gasto público. Éste último creció un 1,9% en el cuarto trimestre, con un impacto en el crecimiento de 4 décimas, según cálculos del Instituto de Estudios Económicos (IEE). Esto implica que de no ser por la parte pública, la economía habría sufrido una contracción.
Se pensaba que los resultados avanzados por el INE en enero podían sufrir alguna modificación este viernes al haber señalado el INE que, por cuestiones de calendario, la información disponible en el momento de la elaboración del avance era menor que en ocasiones anteriores, de modo que las cifras podían ser objeto de revisiones ulteriores de mayor magnitud de lo habitual. Sin embargo, la mayoría de los indicadores se han mantenido sin cambios.
Pese a este fuerte crecimiento en 2022, exacto al de 2021, España se sitúa todavía por debajo del nivel de actividad previo a la pandemia. Será este año cuando recupere los niveles, previsiblemente en el tercer trimestre, antes de las elecciones generales. Los organismos económicos nacionales e internacionales han revisado al alza sus expectativas de crecimiento para el 2023, pero todas ellas siguen por debajo de las del Gobierno, que estima un repunte del 2,1% este año.
