El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha dado una nueva alegría al Gobierno este viernes, a un mes de las elecciones. Ha comunicado que el Producto Interior Bruto (PIB) subió más de lo que anticipó en el primer trimestre, una décima más. Además, ha vuelto a revisar al alza el cuarto trimestre de 2022, un periodo en el que de inicio se pensó que la economía había crecido un 0,2% y, tras dos correcciones consecutivas del INE, resulta que lo hizo en un 0,5%.
En abril, el INE ya dio oxígeno al Gobierno al comunicar un crecimiento del 0,5% en el primer trimestre, más intenso de lo que se esperaba, y revisar del 0,2% al 0,4% el crecimiento del tercer y el cuarto trimestre de 2022. Esto último también tiene un impacto positivo en el crecimiento del conjunto del 2023, conocido como 'efecto arrastre' (carry-over, en inglés).
"Aunque mantuviéramos constantes las previsiones para el resto de trimestres del año, esa décima adicional en el cuarto trimestre de 2022 más la décima 'extra' del primer trimestre supondrían dos décimas más de crecimiento de PIB en 2023", asegura Mª Jesús Fernández, economista senior de Funcas.
Así lo explicó también el director general de Economía y Estadística del Banco de España, Ángel Gavilán, esta misma semana, en la actualización de sus proyecciones para la economía española. Justo cuatro días antes de que el INE haya dado a conocer los nuevos datos, el BdE elevó del 1,6% al 2,3% el crecimiento previsto para este año.
De esas siete décimas, cinco venían dadas por la primera revisión al alza del INE en el crecimiento del PIB de la segunda parte de 2022 y por el avance del 0,5% del primer trimestre, que resultó ser más potente de lo previsto por el BdE. Esto implica que si el Banco de España incorporara la última actualización del INE, y asumiendo que el resto del año no empeora, su previsión se podría elevar al 2,5%.
Revisiones al alza antes del 23-J
La revisión del INE, marcada por calendario, llega dos semanas antes del inicio de la campaña electoral el 7 de julio, lo que deja algo de margen al Gobierno para elevar el crecimiento estimado en su cuadro macroeconómico de 2023, reforzando el mensaje que ha lanzado Pedro Sánchez de que la economía "va como una moto" gracias a su gestión.
Su previsión para este año lleva anclada en el 2,1% desde la presentación de los Presupuestos 2023 en otoño. Ésta era más optimista que la del resto de organismos económicos en aquel momento, pero ahora están todas próximas al haberla mantenido inmóvil el Ejecutivo mientras el resto las revisaba al alza, conforme el INE iba actualizando los datos.
Según fuentes expertas, esto hará que si el Gobierno incorporara todas las revisiones del INE antes de las elecciones, su cifra vuelva a estar por encima de la del resto de organismos económicos. "Seguiría siendo más optimista", comentan.
La revisión del INE también llega a tiempo para que los organismos económicos que tienen previsto actualizar sus previsiones en las próximas semanas las eleven por la última revisión del INE. Algunos, como el Banco de España, ya lo han hecho y tienen agendada la próxima actualización ya en otoño; pero otros, como la AIReF, la Comisión Europea o Funcas, tienen pendiente hacerlo antes del 23-J.
No refleja el presente
En todo caso, el Banco de España apuntó en sus previsiones que a finales de este trimestre se han identificado señales de debilitamiento en la economía española que, en caso de intensificarse, podrían provocar una rebaja de la previsión de crecimiento anual en 2023. De hecho, ya se estaría contemplando un segundo semestre algo más flojo que el primero.
En la misma línea, el director del Instituto de Estudios Económicos (IEE) y expresidente del INE, Gregorio Izquierdo, advierte que esta revisión del INE refleja el pasado, no el presente, y algunos indicadores económicos como los PMI de la industria, la contratación del crédito y el empleo están apuntando ya, desde hace unas semanas, a una moderación del ciclo económico.
"El efecto estadístico que tiene la revisión del INE en el crecimiento anual no refleja la situación económica actual. En base a los indicadores mencionados y al efecto retardado del endurecimiento de la política monetaria anticipamos que el segundo semestre será peor que el primero", explica Izquierdo. Pero esto se notará especialmente y, sobre todo, se comunicará por el INE ya tras el 23 de julio.
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